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Momentos muy emotivas los que se han vivido en Ribeira, en A Coruña, con la llegada de los cuatro supervivientes del naufragio en Malvinas. Los familiares de los marinos gallegos supervivientes del naufragio ya han podido abrazarles.
Pasadas las 13:00 horas, los supervivientes aterrizaban en Santiago de Compostela a bordo del Airbus A330 de Defensa. Allí les esperaban las autoridades y sus familiares. Solo el capitán y el primer oficial han sido trasladados hasta el Hospital Clínico de Santiago donde han permanecido en observación durante todo el día hasta que han recibido el alta médica a última hora de la tarde. Mientras, en Ribeira respiran con alivia tras la vuelta de estos supervivientes.
En el interior del avión viajaban los seis tripulantes españoles supervivientes del naufragio. Las ambulancias entran en la pista para asistir a los cuatro marineros que desembarcan en Santiago de Compostela. A lo lejos se puede percibir el alivio en el abrazo a las familias. Instantes soñados que en tierra llevan a la sonrisa.
Francisco Gondar, segundo oficial, acude también a abrazar a las autoridades. Era la primera vez que salía a la mar en el barco naufragado. Por su parte, Ramón García, jefe de máquinas, era rodeado de su mujer y su cuñado. Sólo cabe la alegría.
Los otros dos marineros gallegos, entre ellos el capitán, están en las ambulancias con lesiones leves que les llevan al hospital.
Los supervivientes pasaron 20 horas en mar abierto esperando al rescate, cayendo al agua, recuperándose, momentos que regresarán a sus mentes una y otra vez. Como también el recuerdo de los cuatro compañeros perdidos. Dos de ellos en espera de repatriación y otros dos aún desaparecidos.
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