Ahora que acaba de arrancar la temporada estival, y llegan los chapuzones en playas, piscinas y ríos, los médicos han querido alertar sobre la importancia de ser prudentes a la hora de lanzarse al agua.
En Galicia, por ejemplo, en un mes ha habido dos lesionados medulares debido a zambullidas de cabeza. El último caso, ocurrido hace una semana, es el de un joven de 19 años que se tiró desde una roca y chocó contra el fondo.
El doctor Antonio Rodríguez, jefe de la Unidad de Lesionados Medulares del CHUAC, en A Coruña, ha atendido a Informativos Telecinco y ha subrayado que uno de los grandes peligros del verano son las lesiones medulares por zambullida.
"Tirarse de cabeza al agua puede tener una consecuencia terrible, que es tener una lesión en la médula espinal", señala el médico, añadiendo que hablamos de "una tetraplejia, que afecta a las cuatro extremidades y al manejo de la vejiga y del intestino".
Antes de tirarse de cabeza al agua, el doctor puntualiza que se debe saber cómo hacerlo, lanzarse al menos una vez de pie y comprobar que hay entre 2,5 y 3 metros de profundidad. Como recomendación, también afirma que "debemos comprobar que no existan otros bañistas".
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