Esta mañana los vecinos de una pequeña localidad de Zamora han visto aparecer a helicópteros y decenas de policías armados y no sabían qué estaba pasando. Imaginen el susto hasta que han sabido qué había detrás de toda esa operación de rescate había un simulacro.

La Guardia Civil toma posiciones, prepara las armas y asalta un colegio para neutralizar a los yihadistas que han secuestrado dos aulas de tercero de la ESO.

"¿Qué ha pasado aquí? No sé, nos han mandado tirarnos al suelo", decía uno de los estudiantes. Mientras los niños daban una aparente clase normal, la Guardia Civil gritaba: ¡Guardia Civil! ¡Arriba las manos, tira el arma!

Al final, había suspiros de alivio al ver que se trataba de un simulacro completamente sorpresa y todo había sido una actuación. Incluso el director del centro, Juan José Pérez Bartolomé, fingía la llamada en la que pedía ayuda. La escena no solo ha impresionado a los alumnos. Lorena Martín, profesora de inglés, contaba que en la clase unas voces les pidieron tirarse al suelo y empezaron a gritar "Alá es grande" y que pusieron música árabe.

Las fuerzas militares, incluso, intervinieron en el edificio mientras un helicóptero sobrevolaba las instalaciones para evitar la huida de los terroristas. El ejercicio que ha demostrado la capacidad de respuesta y coordinación en situaciones críticas. Héctor David Pulido, teniente coronel jefe de la comandancia de Zamora, señalaba que la intención de este evento es detectar los fallos y aquellas áreas de mejora para que la respuesta de la Guardia Civil en estas situaciones sea mejor.

Una vez pasado el susto, los adolescentes son conscientes de que esta es una situación que podría pasar. Muchos han sido los que han agradecido.... volver a clase.

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