Declarado culpable el hombre que mató a tiros a un ladrón que entró en su casa en Ciudad Real
La Fiscalía rebaja de 12 a 6 años la petición de cárcel para el acusado, teniendo en cuenta los eximentes y atenuantes
Los miembros del jurado alcanzaron una posición, de siete votos contra dos, tras poco más de 24 horas de deliberación
El acusado de matar a un hombre que entró a robar a su casa de La Atalaya, a la Policía: "Le he disparado yo, lógicamente"
El jurado popular ha declarado culpable de un delito de homicidio con dolo eventual al J.M.L.E., el librero que, con dos disparos, mató a un hombre que accedió a su casa de campo, ubicada en el Parque Forestal de La Atalaya de Ciudad Real, para robar herramientas.
Así lo han dictaminado los miembros del jurado, que este sábado han alcanzado una posición, de siete votos contra dos, tras poco más de 24 horas de deliberación en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, donde se ha celebrado el juicio.
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El jurado también ha considerado probados los eximentes que se esgrimieron sobre que el acusado sufre una "anomalía" o "alteración psíquica", al igual que un atenuante por la confesión del delito ante los agentes de la Policía Nacional tras disparar al hombre que entró a su vivienda.
La Fiscalía rebaja su petición
Por parte de la Fiscalía, que en un principio pedía 12 años de prisión para el octogenario, ha rebajado su solicitud de condena a los 6 años de cárcel, teniendo en cuenta los eximentes y atenuantes, tras escuchar el veredicto del jurado popular.
El suceso se produjo la madrugada del 1 de agosto de 2021 cuando un hombre accedió a la casa de campo del acusado y se sobresaltó por ruidos en el interior de la parcela. Tras despertarse, el acusado cogió una de sus escopetas -disponía de diversas armas de caza en el interior de la vivienda- y salió al exterior del inmueble.
En el interior de su parcela pudo observar, a una distancia de 15 metros, a una persona que portaba una motosierra apagada y otras herramientas que habría sustraído del cuarto de aperos de la casa.
Al comprobar el acusado que estaba siendo víctima de un robo, se dirigió donde se encontraba el presunto ladrón para asestarle un disparo en el tórax a una distancia de cinco metros y sin aviso previo "con el ánimo de acabar con la vida" del intruso.
Acto seguido, el acusado volvió a efectuar un segundo disparo por la espalda que impactó en la cara posterior del tórax. Ambos tiros causaron al ladrón heridas mortales que acabaron con la vida de esta persona. La víctima tenía múltiples antecedentes judiciales por robos.
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