Los dueños de los perros que mataron a dentelladas a una anciana en Alguazas, Murcia, son un chico y una chica de 24 y 25 años que dijeron a la Policía Local cuando se acercaron al lugar de los hechos que los animales eran de su padre con la creencia de que su seguro del hogar podría hacerse cargo de lo ocurrido. Los animales, "potencialmente peligrosos" no tienen chip, ni vacunas, ni ninguno de los documentos que exige la ley.

Los dos perros atacaron con tral brutalidad a la anciana, de 96 años, que los servicios sanitarios trasladados al lugar no pudieron atender a la mujer hasta que llegaron los dueños de los canes. Ellos pudieron calmarlos y apartarlos de la víctima.

El alcalde de Alguazas, José Gabriel García, se ha mostrado indignado porque los perros "potencialmente peligrosos" ni tenían implantado microchip, ni estaban al día con las vacunas, ni estaban censados en el consistorio, ni tenían un seguro de responsabilidad civil, ni una licencia para su tenencia y se encontraban sueltos en la vía pública. Según el ayuntamiento de Alguazas esto suma seis infracciones.

La anciana de 96 años acudió a dar de comer a sus gatos, en El Paraje, un barrio de esencia huertana, cuando dos perros sin bozal ni correa le atacaron salvajemente, indicó el primer edil.

Los dos jóvenes no estaban censados en la casa de huerta donde estaban los perros, sino en Molina de Segura, pero sí residían allí y de no hacerlo hubiera sido mas grave todo lo ocurrido por dejar abandonados dos perros peligrosos. Tras cinco días de lo ocurrido el alcalde se sorprende de que estos jóvenes no se hayan ni acercado a legalizar a los cachorros que además tienen en la finca.

Los perros del ataque se encuentran en cuarentena, que según las ordenanzas municipales, es de 21 días, y además se encuentran en observación veterinaria.

Los perros se encontraban en el patio de una vivienda de huerta que no reunía las condiciones de seguridad necesarias para este tipo de animales que se encontraban sueltos por la calle.

Según el alcalde, los jóvenes no son conscientes de la gravedad de lo ocurrido y su respuesta "ha sido bastante lamentable". Además de las infracciones municipales se enfrentan a una responsabilidad penal por homicidio por imprudencia grave.