Hasta 12 empleados de una residencia de la comarca del Altiplano de Yecla-Jumilla, en Murcia, están siendo investigadas por la Guardia Civil por la muerte de una anciana después de que su familia, alertada por varios mensajes anónimos, denunciase las “extrañas circunstancias” en que se produjo.

Todos ellos están siendo investigados como presuntos autores de delitos de homicidio por imprudencia y de encubrimiento en el marco de un dispositivo bautizado como ‘operación Antecesor’.

Concretamente, la investigación comenzó cuando los familiares de la anciana denunciaron ante las autoridades judiciales las supuestas irregularidades que concurrieron en su muerte, de las que tuvieron noticia a través de una serie de comunicados anónimos.

En esta línea, el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 2 de Yecla ordenó que especialistas en Policía Judicial de la Benemérita investigaran el óbito para aclarar si, pese a que se certificó su muerte natural, –que tuvo lugar el pasado mes de septiembre de 2022–, la anciana falleció fuera de su habitación donde, a priori, debía encontrarse durmiendo.

En el marco de las investigaciones, la Guardia Civil obtuvo la documentación aportada tanto por la gerencia del centro sociosanitario como de otros organismos oficiales de inspección hasta averiguar la identidad de los empleados que, en la tarde noche del día en que la mujer falleció, se encontraban trabajando en la residencia.

Recopilando distintos testimonios e indicios, los investigadores detectaron ciertas incongruencias que alumbraban a comportamientos irregulares de algunos de estos empleados, hasta el punto de deducir que la muerte no se produjo en la habitación de la anciana, sino que ocurrió en el parking del recinto geriátrico, como anunciaban los anónimos.

Tratando de reconstruir los hechos cronológicamente, de la investigación se desprende que todo comenzó a medianoche cuando la anciana, que debía encontrarse durmiendo en su habitación, desapareció. Fue entonces cuando, al parecer, varios empleados estuvieron buscándola hasta bien entrada la madrugada, momento en el que la hallaron ya sin vida en el aparcamiento de la residencia.

En este punto, de acuerdo con información recogida por Europa Press, los indicios obtenidos por los investigadores han permitido averiguar que, con la supuesta intención de ocultar a la familia esta circunstancia, trasladaron el cadáver hasta su habitación, lo asearon y avisaron entonces a los servicios médicos de urgencias.

De este modo, la ‘operación Antecesor’ ha finalizado con la investigación de 12 personas, todas ellas empleadas, como personal sanitario y de dirección, de la residencia.

De ellas, a diez se les atribuye la presunta autoría de delito de homicidio por imprudencia y, al resto, de encubrimiento.

A este respecto, las diligencias instruidas han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Yecla.

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