La Policía Nacional busca al autor del crimen del conserje de un bloque de viviendas asesinado en el propio edificio de Madrid donde trabajaba. El hijo de la víctima había denunciado su desaparición y las cámaras de seguridad desvelaron el resto.
Las autoridades pudieron sacar el cuerpo de Esteban tras horas de angustia para su familia intentando que la policía entrara en la vivienda del sospechoso, después de comprobar la imagen de la cámara.
La policía no podía tirar la puerta abajo sin orden judicial, tuvieron que comprobar con ayuda de los 20 vecinos de esa escalera que no estaba en otra casa. Eso a pesar de que en la cámara al que si se veía salir era al vecino huido, un hombre con síndrome de Diógenes muy conflictivo y con problemas de dinero.
La confirmación de que el cadáver de Esteban estaba en la casa del sospechoso llegó a las 10 de la noche de mano de los bomberos que entraron con una escalera.
Esteban murió de un corte en el cuello, pero en la vivienda hay restos de sangre de proyección y posibles huellas en paredes, pudo intentar pedir ayuda.