Incendio forestal en Tenerife: lo peor habría pasado, pero las llamas siguen fuera de control
La lucha contra las llamas sigue siendo una verdadera batalla en el incendio forestal de Tenerife, con casi 14.000 hectáreas arrasadas
Máxima tensión en el municipio de Güímar, así como los accesos al Observatorio del Teide
Más de 13.000 desalojos por el incendio forestal en Tenerife: "Mi casa no corría riesgo, pero el humo..."
El Gobierno de España declarará al zona catastrófica en la isla de Tenerife en cuanto el incendio forestal -que fue provocado- sede por extinguido o, al menos, controlado. Pero para llegar a ese escenario todavía falta mucho. La lucha contra las llamas sigue siendo una verdadera batalla, en ocasiones, cuerpo a cuerpo. Una brigada especial ha tenido que retirarse por un cambio de viento repentino. A pesar de la voracidad del fuego, las perspectivas son optimistas. Desde el martes pasado se han calcinado casi 14.000 hectáreas.
Parece que lo peor ha pasado, pero las llamas aún no están bajo control, como insisten las autoridades. La evolución este lunes ha sido favorable, pero sigue la preocupación en un perímetro de unos 90 kilómetros. A la espera de datos oficiales, desde la Unidad Militar de Emergencia (UME) han apuntado que hay alerta por la zona de la cumbre, ya que el fuego se acerca a masa forestal, de modo que podría avanzar hacia el sur.
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Los cambios de viento nocturnos siguen complicando los trabajos frente al incendio forestal
También hay mucha atención a la zona de viviendas cercana a Los Realejos. Los cambios de viento nocturnos siguen siendo otro punto destacable contra el que luchar. Máxima tensión en el municipio de Güímar, así como los accesos al Observatorio del Teide.
Preocupa el flanco que afecta al Observatorio del Teide: labores de extinción en la noche del lunes al martes
Las descargas continuas son imprescindibles para combatir un fuego que sigue generando problemas. Desde el aire se comprueba la dimensión real del desastre. Las rachas de viento descendentes, cuando avanza el fuego de forma descendente, aumentan las dificultades. Preocupa el flanco del Observatorio del Teide, que se ha salvado in extremis. Las llamas se han alejado de las zonas habitadas. Por eso se ha concentrado todo el poder de extinción en la cabecera del fuego.