La mujer asesinada en Pozoblanco (Córdoba), presuntamente por su pareja, lo denunció en 2017 por violencia de género y el juez dictó una orden de alejamiento contra él. Según la Subdelegación del Gobierno central en Córdoba, ambos estaban en el Sistema de Seguimiento Integral de los Casos de Violencia de Género (VioGen). Tan solo en 24 horas se han contabilizado tres crímenes machistas.
Pero ambos quedaron “inactivos desde enero de 2018” en el sistema y tampoco “constan denuncias posteriores” de la mujer contra su presunto asesino, con el que tuvo tres hijas que son menores de edad. Una de ellas, de tan solo dos años, fue la que encontró los cadáveres. Ahora las menores se quedarán a cargo de los abuelos paternos.
La Guardia Civil localizó los cadáveres de la mujer (de 31 años) y del hombre (de 39) en el interior de una vivienda, junto a una escopeta. Los cuerpos presentaban heridas “compatibles con arma de fuego”. La Benemérita ha precisado que "en las inmediaciones de donde se hallaron los cadáveres" también "se ha localizado una carabina de aire comprimido con la que, presuntamente, se habría consumado el hecho", según Europa Press.