El juez ha decretado el ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, de la madre que intentó matar a sus tres hijos de 3, 5 y 9 años en Fitero (Navarra). En la resolución judicial, que puede ser recurrida, se le imputa tres delitos de homicidio en grado de tentativa y se pide su ingreso en cárcel por riesgo de fuga. "Sin duda, concurre un evidente riesgo de fuga, a la vista de las elevadas penas que podría verse expuesta la investigada”, asegura el Ministerio Fiscal. Pero también de una reiteración delictiva contra las víctimas que el juez ha destacado por “la agresión tan inopinada, como brutal, desplegada sobre sus tres hijos de corta edad, con remotas o, incluso, nulas posibilidades de defensa". En otra resolución, se le ha atribuido la custodia en exclusiva al padre.

La mujer permanecerá bajo custodia policial en el Hospital Universitario de Navarra debido a las lesiones que se infligió. Una vez que reciba el alta, ingresará en la cárcel. Según el informe del médico forense, la mujer no está en condiciones para declarar ante el juez, motivo por el que, tras haber prorrogado la detención, se ha convocado a las partes para resolver la situación personal de la investigada. La madre se enfrenta a una pena que oscila entre los diez y quince años de prisión por las que se le podría añadir entre cinco y diez años más por cada uno de los menores, así se determina en el artículo 138 del Código Penal.

La madre suministró, a los tres pequeños, ácido clorhídrico en forma líquida (salfumán) y les causó heridas con un cuchillo de cocina de 17 centímetros. Todo ocurrió en el domicilio familiar. Sobre las 5 horas, su marido se fue a trabajar a Hernani (Guipúzcoa). Sobre las 8.45 ella le llamó para decirle que iba a tomar ‘aguafuerte’ porque la estaban vigilando y la gente hablaba de ella cuando la veían. Pero su pareja pensaba que se trataba de una broma.

Entre las 08:45 y las 10:30 “con intención de acabar con su vida y la de sus tres hijos”, la mujer les suministró salfumán y seguidamente “les asestó varias incisiones en el cuerpo con un cuchillo de cocina de unos 17 centímetros de hoja metálica”. Los tres menores acabaron hospitalizados con diversas secuelas como quemaduras en la boca y faringe por el ácido. Después, la investigada ingirió “una cantidad importante de esa misma sustancia corrosiva y se autolesionó con un cuchillo, en el abdomen, que le ocasionó severas lesiones”.

Tal y como lo ha revelado el alcalde de la localidad, Miguel Aguirre, fueron dos de los niños los que "consiguieron escapar y localizar a unos familiares o amigos que viven muy cerca y les contaron lo que estaba pasando. Son esos niños quienes han dado la voz de alarma". El padre continúa en estado de shock sin entender lo que ha sucedido. Solo es capaz de recordar que se iban a ir de vacaciones a Marruecos y que, incluso, tenían las maletas hechas.