Hace ya mes y medio que los vecinos de Casabermeja, en Málaga, empezaron a sufrir las primeras restricciones por la sequía. Pero la situación es tan extrema que ya solo disponen de agua 6 horas al día. Los pozos del que se abastecen sus 4.000 habitantes están bajo mínimos y los vecinos dependen de sus propias reservas, y no todos tienen esa posibilidad.
Grifos cerrados también en varios pueblos de la Sierra de Huelva. Y temen que la sequia vaya a más. Las restricciones en el consumo de agua se amplían ya a más de 100 municipios de Andalucía, donde se espera uno de los veranos más secos que se recuerdan.