Fin de semana trágico en playas, ríos, pantanos y piscinas. Se investigan hasta 14 posibles casos de ahogamiento en menos de 48 horas, seis de ellos en la Comunidad Valenciana, en el que es uno de los peores datos desde que hay registros.
Ante la situación, especialistas en salvamento insisten en que muchas muertes son evitables si se tiene más percepción del riesgo a la hora de realizar actividades acuáticas. En apenas dos minutos, subrayan, una persona puede fallecer ahogada, por lo que insisten en la importancia de hacer caso de las advertencias, como las banderas en las playas dispuestas para alertar del peligro, las cuales muchas veces son ignoradas.
En este contexto, solo en el primer semestre del año se han registrado ya 169 ahogamientos.
Uno de los últimos ahogamientos ocurría en la playa del Perrellonet, en Valencia, donde un hombre de 70 años perdía la vida pese a los intentos del servicio de socorrismo por reanimarle. Días antes, otro hombre moría en Alcossebre, Castellón.
En Cataluña, por su parte, cuatro hombres han muerto cuando se daban un baño mientras ondeaba la bandera amarilla.
Pese a las advertencias, mucha gente se salta la prohibición. Algunos lo hacen incluso en bandera roja, como una menor de 13 años que ahora está ingresada en el hospital.
Las imprudencias, recalcan, están detrás de estas terribles cifras. Además, alertan de que la tragedia no solo sobreviene en ríos y playas. También en piscinas, donde otras cinco personas han fallecido este fin de semana y donde llaman a extremar también la vigilancia, especialmente con niños. Dos de las víctimas tenían solo 4 y 8 años.