Según datos del INE, en 2050 cerca de una cuarta parte de la población española tendrá más de 65 años, aunque este cambio demográfico se percibe a menudo como un reto, el nuevo estudio Uniendo Generaciones de Edwards Lifesciences revela que la generación de más edad desempeña un papel fundamental en la sociedad española.
Muchos mayores de 65 años realizan labores de voluntariado, proporcionan cuidados, ejercen de mentores y contribuyen económicamente a las generaciones más jóvenes. Así nos lo explica Ramón García Furquet, director general de Edwards Lifesciences España: “Entendemos que esas interacciones entre generaciones son el pilar sobre el que la solidaridad intergeneracional ha de asentarse, cada día añadimos más vida a los años y no más años a la vida”.
Santiago González Carrero, vicepresidente de CEOMA, tiene claro que es importante cambiar la percepción hacia la población mayor: “Las personas mayores deberíamos todos tener conciencia de seguir aportando a la sociedad y halaga mucho comprobar que las personas jóvenes saben que podemos ser útiles”.
Según el informe, cerca de 3,5 millones de personas mayores de 65 años son voluntarias en sus comunidades locales. María Rosa Luna es una de ellas. “Hace 25 años comencé el voluntariado, la vejez se cuida, no se cura”.
El informe Uniendo Generaciones hace tres recomendaciones para mejorar las interacciones intergeneracionales: “Poner en valor la aportación de las personas mayores a la sociedad, promover acciones de mentoring y, por último, el interés de los mayores en recibir conocimientos digitales de las generaciones más jóvenes”.
La iniciativa pretende cambiar la percepción que se tiene de las personas mayores y hacer hincapié en su contribución positiva a la sociedad.