Las frases de Dani Alves desde la cárcel: "Sigo sin saber por qué ha hecho esto, pero la perdono"
Dani Alves ha roto su silencio por primera vez sobre la presunta violación a una joven, después de cinco meses en prisión preventiva
El futbolista brasileño afirma que no sabe por qué la presunta víctima le acusa de algo que no cometió: dice tener la "conciencia tranquila"
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Dani Alves ha roto su silencio por primera vez, después de cinco meses en prisión preventiva, tras ser acusado de violar a una joven en una discoteca de Barcelona la noche del 30 al 31 de diciembre. El futbolista brasileño afirma que no sabe por qué la presunta víctima le acusa de algo que no cometió.
Así lo ha explicado el exjugador del FC Barcelona, Sevilla FC y PSG, entre otros, en una entrevista concedida a 'El programa de Ana Rosa' de esta casa. La periodista Mayka Navarro ha conseguido hablar con el futbolista brasileño en la cárcel de Brians 2 de Barcelona y obtener su versión sobre lo ocurrido. El deportista ha roto entre lágrimas.
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Estas han sido las frases más destacadas de la entrevista:
- Dani Alves únicamente pide perdón a su mujer, Joana Sanz, y perdona a la joven que lo denunció: "Sigo sin saber por qué ha hecho esto, pero la perdono por el lío en el que me ha metido".
- El futbolista brasileño de 40 años, en su versión de los hechos, recuerda que invitó a la chica y a sus dos amigas al reservado: "Apenas hablamos. Llevábamos un rato bailando pegados y era evidente por los movimientos y las miradas que había una atracción".
- Le propuso ir al baño y asegura que, sin cerrar la puerta con pestillo, se produjo una relación sexual que ella, según el brasileño, en ningún momento quiso detener. Alves insiste en que si a la salida la hubiera visto llorar le hubiera preguntado qué pasaba y habría ido a comisaría para explicar lo sucedido. Él solo se avergüenza de su infidelidad: "Llegué a mi casa, me duché y me enjaboné con rabia".
- En cuanto a la presunta violación, dice dormir con la "conciencia muy tranquila".
Es la versión con la que en dos ocasiones ha intentado salir de la prisión provisional pero la jueza siempre ha insistido en que los gestos de atracción no justifican una posible agresión sexual.