La emoción de Maca en el Día del Donante: "Ahora nuestro hijo Bruno da luz a otras 7 vidas"
Este miércoles 7 de junio es el Día Nacional del Donante y la ONT y Sanidad han organizado un acto con asociaciones de pacientes
Son 5.383 trasplantes realizados durante el 2022, que fueron posibles gracias a 2.196 personas que donaron sus órganos tras fallecer
Bruno donó al morir siete órganos, que dieron vida a otros siete receptores distintos
España recuperó el año pasado el número de trasplantes anterior a la pandemia, con una media de 15 intervenciones diarias. Son 5.383 trasplantes realizados durante el 2022, que fueron posibles gracias a 2.196 personas que donaron sus órganos tras fallecer. Una cifra que se ha conmemorado este martes por el día nacional del donante de órganos, tejidos y células, que se celebra el miércoles 7 de junio.
En el acto han participado las asociaciones de pacientes impulsoras de este día. Entre ellas estaba Macarena, la madre de Bruno. Con cuatro años y medio, Bruno, sufrió los primeros síntomas de una gravísima enfermedad. Tras meses de pruebas, se le diagnosticó un tipo de encefalitis que le causó daños cerebrales irreversibles. La enfermedad que atacó al pequeño afecta a unas 3.000 personas en todo el mundo y tiene un bajísimo índice de supervivencia. Pese a todo, Bruno resistió siete años, hasta que falleció el pasado 15 de noviembre de 2022.
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"El autentico protagonista es Bruno. Él nació sano pero a los cuatro años y medio le vino una enfermedad que le dejó en estado vegetativo de un día para otro. A partir de ahí, luchamos por buscar una salida, pero no la había. Fueron siete años siete años de calvario y sufrimiento hasta que Bruno dijo basta", explica Maca.
El día de la donación
Entonces llegó el momento de entrar en la unidad de cuidados intensivos del hospital Niños Jesús. El principal problema era que Bruno estaba atrapado en un cuerpo que no respondía, pero era consciente de todo. "Sin los profesionales de esta unidad que nos han acompañado en cada segundo de este viaje no hubiera sido posible". Maca y Rafa, eran donantes de órganos pero se enfrentaban al momento más difícil de su vida. Lo tuvieron claro, Bruno iba a dar vida a otros niños.
En ese momento había que alargar la vida de Bruno unas horas para poder dar tiempo a preparar el proceso de la donación. "Esas treinta y pocas horas que tardó en hacerse la donación todos los equipos que estaban con nosotros no nos soltaron de la mano en ningún momento. Humanidad y empatía. A día de hoy, son parte de mi familia". Para Maca había una cosa importante, que el corazón de Bruno fuera compatible y pudiera seguir latiendo en otro niño. Y así fue. Bruno mejoró la vida de siete niños. "Eso es lo que da algo de sentido a lo que ha pasado", dice Maca con una sonrisa.
Siete vidas
"Y tenía mucho miedo al día de la despedida. temía que, cómo se hace en quirófano fuera un momento rápido impersonal. Pero para nada. Estos equipos consiguieron que pudiéramos vivir un momento de paz, un momento dulce a la hora del final. Ese es el momento más duro, la despedida cuando sabes que es la última vez que le vas a poder abrazar. Se hace en quirófano, pero se convirtió en un momento de paz para despedirnos de nuestro hijo. El respeto fue inmenso".
Ahora saben que Bruno ha dado luz a otras siete vidas, que vive a través de siete vidas diferentes, que ve a través de otras retinas, que su corazón sigue latiendo. "Nosotros queríamos que con la donación de Bruno pudiéramos paliar el sufrimiento de otras familias. Es el acto más generoso por parte de parte de Bruno. Es poner la memoria de tu hijo eternamente".
Regalar vida sin nada a cambio
En todo este camino estuvieron acompañados por la doctora Montserrat Nieto Moro, Coordinadora de Trasplantes del Niño Jesús, que ha contado que hablar con familias de donantes pediátricos es muy especial, "principalmente porque hay pocos donantes, por suerte".
"Cuando tenemos un potencial donante, valorarlo no es fácil. Te enfrentas a una familia que su hijo está falleciendo, hay que retrasar un poco ese momento para organizarlo todo y salvar los más órganos posibles, pero eso significa que otros niños pueden vivir".
Por todo ello el objetivo es acompañar, apoyar y ayudar a la familia, para mi es lo más importante. Cada familia es única y cada donante nos deja un poso. "Pero veo en los ojos las ganas de ayudar a otra persona, a otro niño, en este caso. A veces la donación es un proceso largo. Por eso quiero dar mi agradecimiento a las familias y a sus hijos los donantes que ayudan a tantos niños", ha concluido.
También ha intervenido Dolores es la presidenta de trasplantados de corazón que ha agradecido a las familias su acto generoso sin obtener nada a cambio. "Queremos dar las gracias a esas familias que en un momento muy dura de sus vidas regalan vida sin obtener nada a cambio. Es uno de los actos más generosa que pueden hacer las personas. Llevamos más de 30 años siendo líderes en donación y trasplante, aunque todavía el 88% de las familias aprueba la donación, una cifra mejorable. Gracias por salvar tantas vidas".