En un barrio de Ferrol los vecinos se encuentran en vilo desde que a uno de ellos se le haya escapado un boa constrictor. El caso ha llevado a muchos a hacerse la misma pregunta: ¿es legal que un vecino de nuestro edificio tenga en casa una especie peligrosa?
El primer requisito alude a la documentación, es necesario demostrar la tenencia para saber que el animal no procede del tráfico ilegal de especie.
Con los papeles en regla se pueden poseer serpientes de varios tipos, adecuando el espacio a sus necesidades y peligrosidad.
Para una boa o una anaconda, que puede alcanzar más de 4 metros, solicitan tener doble puerta en la habitación donde esté el animal.
En cuanto a la boa que buscan en Ferrol, una boa albina, no alcanza más de 2 metros, y eso resta peligro a su cualidad constrictora, lo que sí podría es morder. “Sería una mordedura como un gato o un perro pequeño”, aseguran los expertos. En caso de que sucediese habría que desinfectar la herida.
No están permitidos para particulares los reptiles venenosos. Todo esto con la ley actual, cuando la nueva ley de protección animal entre en vigor en septiembre, habrá que ver cuáles de estos ejemplares siguen estando permitidos en calidad de mascotas.