Decidió que dejar a una de sus hijas menores al cuidado de sus hermanas para estar a solas con su pareja no era buena idea. Y cambió de opinión. Salió de casa y fue a estar con ella pero a la vuelta se encontró con la reacción de su pareja. Brutal. Tanto, que un juez ha ordenado el ingreso en prisión provisional del hombre por apalizar a su pareja y retenerla en su domicilio. En la paliza la mujer perdió varias piezas dentales y heridas en la cara y en la cabeza. No solo eso. Tras varias horas sin saber nada de su madre, bien entrada la noche, una de sus hijas recibió una fotografía de su madre golpeada.
La Policía Nacional de la Comisaría Local de Dos Hermanas tuvo conocimiento de los hechos a través de la denuncia interpuesta por las hijas de la víctima que estaban preocupadas por el estado de la madre. Al parecer, la víctima en compañía de su pareja sentimental, acudió al domicilio de una de sus hijas a fin de dejar a su cuidado a la hermana menor, para poder pasar un tiempo a solas con su pareja. Tras abandonar el domicilio, una de las hijas de la víctima pudo oír a su madre gritar, si bien al bajar a la calle, ya nadie se encontraba en el lugar, intentando desde entonces contactar con su madre a través del teléfono, así como son su pareja sentimental.
En un momento de la tarde, y dado que su compañero sentimental se había dormido, la víctima salió de su domicilio para dirigirse a la estación a fin de tomar el tren hacia la localidad de Dos Hermanas y así poder estar con su hija menor de edad. Era tarde y perdió el último tren. Al carecer de otros medios de transporte y de dinero, la víctima tomó la decisión de llamar a su pareja para que pasara a recogerla, lo que efectivamente hizo.
La víctima subió al coche de su pareja y fue entonces cuando cometieron las agresiones, con todo tipo de golpes en cara y cabeza. La paliza se prolongó durante horas una vez de vuelta en el domicilio del agresor, impidiéndole éste el poder salir o acudir en busca de ayuda.
Finalmente, la Policía Nacional pudo localizar y detener al agresor en el interior de su domicilio y poner a salvo a la víctima para que pudiera ser atendida por los servicios médicos. El agresor ha sido detenido por un delito de detención ilegal y lesiones graves por posible violencia de Género, y puesto a disposición Judicial, la que decretó su ingreso en prisión.