El invento español contra los incendios: un líquido entre seis y diez veces más rápido y efectivo que el agua

  • Se trata de un producto creado por el aragonés César Sallén que promete acabar con los incendios

  • Una solución líquida que actúa como agente contra el fuego creando una barrera entre las llamas y los materiales

Han creado un producto ecológico que promete acabar de un modo efectivo y rápido con los incendios, impidiendo no solo que las llamas se propaguen, sino también extinguirlas sin provocar humo.

Un material creado y patentado por César Sallén, un empresario e inventor aragonés creador entre otros productos del sistema de bloqueo de doble puerta de los bancos. Pero lo que ahora promete con Ecofire va más allá, lo que pretende bloquear en este caso es al fuego y "revolucionar el mundo de la extinción de incendios", según explican en Simonrack, la empresa que lo comercializa.

Tras unos 15 años investigando Sallén ha desarrollado Ecofire, un material que al extenderlo evita la transmisión de oxígeno y de temperatura y con eso impide que el fuego se propague.

Esta solución líquida actúa como agente contra el fuego creando una barrera entre las llamas y los materiales, con todo tipo de materiales, según prometen. Desde papel, cartón, plásticos, metal y no requiere medidas especiales de manipulación, por lo que puede usarse tanto a nivel doméstico como profesional.

Desde Simonrack, ya se han puesto en contacto con agentes de varios países que se han mostrado interesados, según explica su CEO Ibán Moreno:

Una vez aplicado el producto lo que hace es ahogar al fuego bajando incluso su temperatura, aseguran. Pero no solo eso, el uso de este producto tiene otra ventaja, permite perimetrar una zona y evitar por tanto que el incendio llegue ahí. Por lo que podría emplearse también como prevención.

Y desde la empresa destacan además otra característica que lo distingue: es entre 6 y 10 veces más rápido que el agua, y una vez extinguido el fuego totalmente, no hay riesgo de que se vuelva a reactivar.

Con una consistencia similar al agua, todos sus componentes son orgánicos y biodegradables, hasta tal punto que se puede comer, lo que puede ser una ventaja para impedir que los animales se intoxiquen si lo prueban.

Todo un invento de origen español galardonado con el primer premio a la mejor prueba de producto de los "Advanced Manufacturing Awards", entregados en IFEMA durante la celebración de MetalMadrid en 2022 y que podría acabar con la pesadilla de los incendios forestales.