"Si no recibes uno de estos correos electrónicos o invitaciones a reuniones en las próximas dos horas, significa que tu función no ha sido afectada." Es el mensaje real enviado estos días a los empleados de una compañía con sede en Silicon Valley para comunicarles su proceso online de despidos.
Se trata de una de las 340 tecnológicas mundiales que en menos de mes y medio de este 2023 han echado a más de 100.000 de sus trabajadores. Un efecto dominó en el sector que se arrastra de forma acusada desde mediados del año pasado, con más de 260.000 despidos, con múltiples causas, según los analistas consultados.
La patronal española del sector, Ametic, niega que haya crisis en las tecnológicas y asegura que todo responde a ajustes empresariales tras los años de alta demanda por la pandemia. La situación inestable global, con una crisis energética, inflación, además de los nuevos conflictos bélicos y diplomáticos generan una inestabilidad, dicen los expertos, que hacen que las inversiones tengan una visión más cortoplacista.
Y es por eso, aseguran los analistas, que se buscan beneficios inmediatos deshaciéndose de su principal gasto, la masa salarial, en un contexto también afectado, afirman, por la bajada del consumo después de la vuelta a la normalidad tras el fin de las restricciones sanitarias. ... Las grandes y más conocidas, como Amazon, Microsoft, Google, Meta o Spotify, suman, también, despidos masivos que, eso sí, quedan lejos aún del total contratado desde el inicio de la pandemia. Un reajuste laboral no comparable al de otros sectores, ya que la reinserción laboral de los despedidos suele ser bastante rápida, según los expertos. Situación de la que España puede verse beneficiada con la contratación de personal cualificado de las principales compañías internacionales y en la que está por ver, también, cómo impacta la automatización de procesos con la inteligencia artificial.