Los Bomberos de Álava han hecho sonar este domingo por la mañana las sirenas en honor a su compañero Iker Bilbao, que trabajaba en el parque de Llodio y que fue sepultado por un alud en la Patagonia argentina junto a la también montañera vasca Amaia Agirre.
El homenaje de los bomberos alaveses se ha celebrado después de que se conociera que la Comisión de Auxilio del Centro Andino El Chalten había renunciado a seguir buscando a los dos alpinistas, dándoles por muertos, debido al riesgo que representaba para el grupo de rescatadores.
Los montañeros Iker Bilbao y Amaia Agirre estaban desaparecidos tras haberse visto sorprendidos por una avalancha de nieve mientras descendían del pico Fitz Roy, en la Patagonia. La localidad vizcaína de Durango y el municipio guipuzcoano de Urnieta, de donde eran naturales los dos alpinistas sepultados, han vivido este domingo una jornada de duelo.
Por otra parte, Josu Linaza, de Igorre (Vizcaya), el tercer alpinista que les acompañaba y que logró salvar su vida y dar aviso de lo ocurrido, volverá a Euskadi cuando las condiciones meteorológicas se lo permitan. Mientras tanto, permanece en El Chalten.
La Comisión de Auxilio del Centro Andino El Chalten explicó que la grieta en la que se encontrarían enterrados los escaladores mide 100 metros de largo por 8 metros de ancho, aproximadamente, y 15 metros de profundidad hasta el tapón de nieve, desconociendo el fondo real que tiene. Por todo ello, decidió suspender la búsqueda.