Miembros de la organización AnimaNaturalis han llevado a cabo este domingo en Barcelona una acción para protestar contra el asesinato de animales y el posterior uso de sus pieles por parte de la industria peletera. Los manifestantes se han tumbado en el suelo completamente desnudos, rociados con sangre artificial y amontonados unos encima de otros, tal y como quedan los cuerpos de los animales muertos una vez que les han despellejado. Por otra parte, en una protesta en Chile, dejaron el cadáver de un león frente al palacio presidencial.
El objetivo es concienciar a la población del enorme número de animales que se utilizan para confeccionar un solo abrigo de piel y presionar para lograr el cierre de todas las granjas peleteras de España. "Cada vez más países desarrollados prohíben las granjas peleteras y España queda a la cola de Europa, una vez más", ha asegurado Gemma Guaza, coordinadora de AnimaNaturalis en la capital catalana.