El hombre acusado de apuñalar a su expareja delante de sus hijas el pasado mes de diciembre en la localidad de Estepona, en Málaga, ha sido encontrado muerto en su celda de la prisión de Alhaurín de la Torre, donde se encontraba recluido tras ser detenido. Los funcionarios le han encontrado ahorcado con un cordón de una de sus zapatillas sobre las 08:30 horas de la mañana de este martes.
El hombre ha aprovechado un momento en el que se encontraba solo para quitarse la vida. Y es que, según recoge 'ABC Sevilla', varios testigos afirman que estaba con vida en el recuento diario que se realiza en la prisión a las 08:00 horas de la mañana. No obstante, media hora después, habría aprovechado que su compañero de celda había salido del centro penitenciario para llevar a cabo su acción.
El recluso estaba acusado de intentar asesinar a su expareja en Estepona, no consentía que mantuviera otra relación sentimental. La rápida intervención de las dos hijas menores de la mujer de 42 años impidieron que la matara a puñaladas en el rellano de su vivienda. A pesar de su actuación, el agresor logró ocasionarle hasta ocho heridas en la espalda. Fue detenido al poco tiempo, después de que los agentes siguieran un rastro de sangre -se autolesionó en un brazo-. Los hechos se remontan a la noche del pasado lunes 19 de diciembre.
El hombre que se ha quitado la vida, según recogen los informes, había estado en prisión anteriormente. Al parecer, en el momento en el que cometió los hechos acababa de salir. Las autoridades destacan que había sido detenido por distintos motivos, entre otros, supuestos casos de violencia de género. La víctima ya había presentado denuncias previas contra él y había pasado por una orden de alejamiento que ya había vencido.