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La extenista estadounidense, de origen checo, Martina Navratilova ha anunciado que sufre dos cáncer a la vez, uno de garganta y otro de mama. Ambos se encuentran en su primera fase de desarrollo y no se trata de metástasis, son tumores independientes.
De hecho la tenista descubrió en primer lugar el cáncer de garganta en fase 1. En los exámenes médicos que le realizaron posteriormente detectaron un segundo tumor, este de mama, sin relación con el anterior. Navratilova ya superó con radioterapia un cáncer de pecho hace 13 años.
Los tumores malignos primarios sincrónicos son relativamente inusuales.
La presencia de dos o más tumores malignos, distintos e independientes en un mismo paciente, excluyendo las metástasis, se definen como sincrónicos si coinciden en el tiempo.
Son unas neoplasias bastante raras y si se detectan a tiempo tienen buen pronóstico. De hecho son más fáciles de tratar que una metástasis.
Los tumores sincrónicos se refieren a casos en los que el segundo cáncer primario se diagnostica dentro de los 6 meses posteriores al cáncer primario. Los tumores metacrónicos son otra modalidad que se refieren a los casos en los que el segundo cáncer primario se diagnostica más de 6 meses después del diagnóstico del primer cáncer primario.
Los especialistas creen que padecerlos podría tener un origen genético y que el riesgo de padecerlos aumenta con la edad pero los mecanismos moleculares que envuelven a muchos de estos tumores están aún por dilucidar. Navratilova cuenta en la actualidad con 66 años.
Según algunos estudios, el 20-30% de los pacientes con tumores laríngeos presentan un tumor sincrónico en otra localización del tracto aerodigestivo superior, generalmente de la misma extirpe. En el caso de Navratilova el segundo tumor está en una mama.
La exnúmero 1 del tenis femenino ha asegurado al anunciar la noticia que va a "pelear con todo lo que tengo", y en su caso puede que tenga éxito.
La evolución natural del cáncer laríngeo está determinada por su localización y en caso de fase 1, como el que padece, tienen buen diagnóstico.
También el otro cáncer que padece está en la misma fase, y por tanto lo habitual es que sea relativamente pequeño y no se haya propagado a los ganglios linfáticos por lo que también presenta buen pronóstico.