La familia de Fernando asegura que su muerte no tiene relación con algún tipo de "ajuste de cuentas"

Este jueves ha comenzado la búsqueda de Ángel, el menor de 11 años que desapareció hace poco menos de dos semanas en el barrio madrileño de Carabanchel junto a su primo Fernando, de 17 años, quien fue hallado muerto en un vertedero de Toledo la semana pasada. La orden judicial para paralizar la planta de reciclaje ha llegado a primera hora de la tarde. Los agentes ya pueden entrar para intentar localizar al pequeño, una operación más que compleja. La familia descarta un accidente y la posible relación de lo ocurrido con un "ajuste de cuentas" o un "problema entre familias".

El entorno de los chicos confía en encontrar el cuerpo de Ángel en el mismo punto en el que fue hallado su primo mayor. Desde que apareció el cadáver de Fernando el pasado jueves se ha seguido acumulando basura y ahora hay que volver atrás. Además, también sigue en paralelo la investigación respecto a qué hicieron los chavales desde que llegaron el día de su desaparición a Toledo hasta dos días y medio después -la autopsia data en esa fecha el momento de la muerte-.

La autopsia practicada a Fernando es preliminar. No es definitiva. Todavía no se ha esclarecido esa asfixia no mecánica y no criminal. De hecho, la familia insiste en que no sufrieron un accidente, pero se desconoce si se investiga la posible participación de un tercero. Los padres del joven van a pedir una segunda autopsia. Esta tarde ya pueden trasladar el cuerpo de su hijo a Madrid, después de que no se les haya permitido verle en el tanatorio de la localidad manchega.

Los padres de Fernando, eso sí, han podido confirmar que el cuerpo hallado el pasado jueves era de su hijo gracias a un dato fundamental: "Un tatuaje que tenía en el brazo", según ha explicado ante los medios Juan José Cortes, padre de Mari Luz Cortés, que ha arropado a la familia en esta jornada tan dura. Todos piden que se acelere la búsqueda de Ángel: "Que ponga el Estado todos los medios disponibles, igual que lo han hecho en otros casos", ha comentado en este sentido Sinaí Jiménez, presidente de la Sociedad Gitana Española.

La búsqueda de Ángel será complicada, porque el cuerpo de Fernando se encontró el jueves y se han acumulado muchas toneladas de basura desde entonces. Los investigadores tratan de averiguar cómo llegó hasta allí, a la familia no le convence la hipótesis de que se hubiera refugiado en un contenedor: "Si un niño se mete y se refugia por el frío en un contenedor, deberían estar los dos. Y si aparece un cuerpo, deberían aparecer los dos", ha señalado Antonio Fernández, tío de los chicos. También descartan la posibilidad de que sea una venganza. "Se descarta, rotundamente, que se trate de un ajuste de cuentas o un problema entre familias", ha sentenciado Juan José Cortés. La angustia continúa por el paradero del pequeño.