Desalojan una vivienda en Irún por una posible explosión: un hombre intentó prender fuego a una bombona de butano
El detenido intentó provocar una explosión con una bombona de butano para supuestamente herir a los agentes, el inmueble tuvo que ser desalojado
El hombre de 33 años, también intentó supuestamente matar a los agentes de la Policía Local de Irún con un cuchillo
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Un hombre de 33 años, ha sido detenido esta madrugada por la Ertzaintza en una vivienda de Irún (Guipúzcoa). El detenido se enfrenta a un delito de homicidio, en grado de tentativa, tras supuestamente intentar acuchillar en múltiples ocasiones a unos agentes de la policía local de la localidad. Pero afortunadamente, no logró alcanzarles. Además, también se le acusa de prender fuego a una bombona de butano "atentado contra sus vidas" nuevamente. Debido a esta posible explosión, el inmueble tuvo que ser desalojado de urgencia, ya que podría haber supuesto grandes daños, tanto materiales como personales, como ocurrió en bar de Madrid.
Según han comunicado este lunes desde el Departamento vasco de Seguridad, pasadas las once de la noche de este pasado domingo, varios agentes de la Policía local de Irún tuvieron que pedir la ayuda de la Ertzaintza ya que se encontraban en un domicilio al que habían acudido tras una llamada que notificaba de una presunta agresión con arma blanca.
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El agresor se atrincheró en el domicilio con al menos cinco bombonas de butano
Tras la llegada de los agentes a la vivienda, la cual se encontraba abierta, encontraron a un hombre armado con un cuchillo autolesionándose. Al intentar desarmarle, fue cuándo el supuesto agresor comenzó a intentar apuñalar a los agentes en reiteradas ocasiones, pero no lo consiguió.
Acto seguido, cogió una bombona de butano, de las al menos cinco que se encontraban en el lugar, y tras abrir la válvula le prendió fuego con un mechero, intentando herir así nuevamente a los miembros de la Policía que se personaron. Seguidamente se atrincheró en una habitación del domicilio. El inmueble, tuvo que ser desalojado ante una posible explosión.
Tras varios intentos para que detuviese su actitud agresiva para los agentes por parte de los negociadores de la Ertzaintza, agentes de intervención accedieron a la vivienda y localizaron a la persona seminconsciente. Tras ello, fue trasladado al hospital en calidad de detenido, quedando la situación controlada y fuera de peligro. Ahora se enfrenta a un delito de intento de homicidio, atentado a agentes de la autoridad, así como un delito de daños en la propiedad.