Ocho familias de las localidades toledanas de Valmojado y la vecina Las Ventas de Retamosa han denunciado las continuas agresiones físicas y verbales que sufren sus hijos por parte de una banda de adolescentes sin que las autoridades locales hayan podido hacerles frente. Los denunciantes aseguran que la dirección del IES Cañada Real, centro en el que estudian las víctimas y algunos de los presuntos agresores, esta desbordada por la situación y, aunque han reclamado mayor presencia policial a la entrada y salida del centro, no ha conseguido que su demanda haya sido atendida completamente.

En un escrito remito a la subdelegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, las familias han trasladado a las autoridades el temor a que "las agresiones vayan a más" por la posibilidad de que "usen armas blancas ya que estos individuos se denominan como banda".

Se refieren a 'Los Panchos' un grupo de jóvenes y adolescentes que desde hace tiempo atemorizan a los vecinos de estos dos pueblos y que suelen reunirse a practicar botellón en las inmediaciones del instituto. Algunos de los padres de las víctimas relatan palizas o acosos constantes no solo en las calle del pueblo, sino también en el interior del centro escolar. En su escrito de denuncia aseguran que a pesar de que existen protocolos activos contra el acoso escolar, "la situación no ha mejorado ya que siguen las agresiones en los pasillos del centro, en los recreos; les acorralan en los baños, a las entradas y salidas del centro". Algunos de los presuntos agresores son alumnos que han sido expulsados del centro por estos motivos.

La familias afectadas se han organizado para pedir ayuda y exigir soluciones a la dirección del IES Cañada Real, el Ayuntamiento y la subdelegación del gobierno en Castilla-La Mancha, pero por el momento no han conseguido que se detengan detengan las agresiones e insultos. Piden sobre todo vigilancia policial a la salida y entrada del centro porque es el momento en el que se han registrado mayoritariamente las situaciones de acoso a sus hijos.

El grito de desesperación de estas familias ha encontrado cierta respuesta en la Guardia Civil cuyas patrullas hacen acto de presencia de vez en cuando a las puertas del instituto, algo que no es suficiente para los denunciantes. Y poco más, ya que desde el Ayuntamiento de Valmojado no han tenido respuestas a sus demandas de mayor vigilancia policial, una necesidad compartida por los responsables del instituto que en múltiples ocasiones han tenido que salir a la puerta del centro para que las situaciones de acoso no llegasen a más.

Mientras llega una solución que dé seguridad y confianza a padres alumnos, las familias denunciantes se organizan para acompañar a sus hijos en las horas de entrada y salida del centro al tiempo que les impiden pasear libremente por las calles de Valmojado para evitar que sean víctimas de más ataques por parte de los miembros de la banda de 'Los Panchos'.