La colaboración de cientos de personas en Twitter ha sido clave para esclarecer los hechos del 'crimen de la etiqueta'. La Policía ya ha detenido a las supuestas nueve personas implicadas en el homicidio, hace un año, de un hombre en su domicilio de Madrid, donde los sospechosos se dejaron una etiqueta de color naranja procedente de un bazar chino en el que habían comprado guantes de látex, cinta americana y bridas, instrumentos con los que amordazaron a la víctima.
Este jueves, la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha dado cuenta de la resolución de este crimen y la detención de las nueve personas que a finales de noviembre de 2021 planificaron asaltar el piso de un hombre para robarle la caja fuerte.
Los asaltantes amordazaron, maniataron y torturaron a la víctima hasta que finalmente le causaron la muerte, según detalla la Policía Nacional. El cuerpo sin vida fue hallado hace casi un año, el 28 de noviembre de 2021, en su domicilio particular, dónde se presentaron las fuerzas de seguridad al ser alertadas por familiares que no podían acceder al piso al estar la puerta cerrada por dentro, por lo que fue necesario la intervención de un cerrajero.
Una vez en el interior de la vivienda, situada en la calle de Sierra Toledana, en el distrito de Puente de Vallecas, los agentes localizaron el cadáver semidesnudo y con signos de violencia, por lo que se hizo cargo de la investigación el Grupo V de Homicidios de Madrid.
Durante la investigación, los agentes determinaron que los autores planificaron el asalto a sabiendas de que la víctima estaba en su casa. Querían que les dijera la clave de la caja fuerte, si bien ante la negativa del hombre a facilitarles la combinación, los asaltantes emplearon cuchillos de cocina para llevarse la caja sin abrir.
En la inspección ocular, para encontrar posibles pruebas que determinasen los motivos y quién o quienes habían realizado el golpe, los agentes encontraron una etiqueta de color naranja en la que se podía leer en letras mayúsculas "SÚPER BAZAR" y el precio de 1,80 euros. Los investigadores sospecharon que podía corresponder a la tienda donde los asaltantes habían comprado los guantes de látex y la cinta americana que había sido utilizada posteriormente para maniatar al hombre.
Comenzaron entonces a inspeccionar establecimientos de la zona e, incluso de otros distritos, pero las gestiones no tuvieron éxito hasta que días después los responsables de la investigación decidieron pedir la colaboración ciudadana a través de la cuenta de Twitter de la Policía, que cuenta con 3.757.551 seguidores.
"¿Sabes de qué comercio de la Comunidad de Madrid puede ser esta etiqueta?", preguntaban el 2 diciembre en su perfil. "Solicita a quien tenga información sobre ello que se comuniquen por correo a la dirección madrid.colabora@policia.es".
Esa misma tarde, ha revelado este jueves también la Policía en Twitter, los agentes encontraron el lugar, un establecimiento en el municipio madrileño de Parla, gracias a los cientos de mensajes recibidos que fueron analizaron en tiempo récord.
Después de casi un año de intensas investigaciones para atar todos los cabos que diesen con la autoría del asesinato, la Policía da por esclarecido el homicidio en el que estuvieron implicados siete hombres y dos mujeres, entre los que figuran dos familiares directos de la víctima.
Las detenciones se practicaron en tres fases: el 2 y 14 de junio y el 7 de julio de 2022. A seis de ellos se les considera partícipes de un delito de homicidio, robo con violencia, detención ilegal y pertenencia a grupo criminal, mientras que los otros tres arrestados son presuntos responsables de los delitos de robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal.
Asimismo, se efectuaron dos registros simultáneos en la localidad de Azuqueca de Henares (Guadalajara), donde fueron intervenidos dispositivos electrónicos, diversa sustancia estupefaciente y un arma de aire comprimido, además de producirse las detenciones de los principales investigados. Tras pasar a disposición de la autoridad judicial, se decretó el ingreso en prisión provisional de todos ellos.
La Policía Nacional ha recurrido en múltiples ocasiones a la colaboración ciudadana a través de Twitter para esclarecer los hechos ocurridos con algún suceso. Generalmente, obtienen una respuesta eficaz que les ayuda a avanzar en ciertas investigaciones.
Hace apenas una semana, los agentes daban por identificado en una prisión rusa a un asesino en serie, autor de dos homicidios y otro en grado de tentativa perpetrados en 2020 en la provincia de Alicante. Para su localización resultó clave la difusión a la ciudadanía, el pasado junio, de unas imágenes captadas por una cámara cuando el hombre huía de su intento de asesinato.
En apenas tres horas @policia encontró en enero la vivienda a la que pertenecían tres fotografías de una habitación de una niña que podía estar siendo víctima de abusos.
En 2018, por ejemplo, difundieron una llamada anónima a la Cruz Roja de Madrid que resultó ser clave para esclarecer el crimen de un anciano de 81 años que murió asfixiado tras ser maniatado y amordazado el 4 de febrero de 2017 en Santander.