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La reapertura de 80 centros para urgencias extrahospitalarias con la mitad de personal, que ha desembocado en una huelga convocada por el sindicato de médicos Amyts, ha puesto patas arriba el sistema sanitario madrileño. Según Isabel Díaz Ayuso, la culpa la tiene la falta de médicos en España. “Necesitamos nuevas facultades de Medicina porque es un problema”, ha asegurado la presidenta madrileña en El Programa de Ana Rosa, en Telecinco. ¿De verdad es ése el problema?
El tema de la falta de médicos lleva años denunciándose en España. El Ministerio de Sanidad reconoce en un informe que hace falta un millar de facultativos al año. Pero al mismo tiempo, nuestro país es uno de los que cuenta con mayor número de facultades de Medicina por habitante, una auténtica cantera a la hora de formar profesionales.
El número de médicos formados cada año en España se regula mediante un equilibrio entre las plazas universitarias, las plazas de especialización MIR -necesario para trabajar en la sanidad pública- y las contrataciones en las comunidades autónomas. Veremos cómo pueden influir la fuga de médicos al extranjero y cómo se compensa con los que vienen de otros países. También como en los últimos años se están incrementando las plazas, aunque quizá tarde para equilibrar a corto plazo el efecto de las jubilaciones en un sector público envejecido.
España es el segundo país del mundo con mayor número de facultades de Medicina por densidad de población, después de Corea del Sur. Actualmente, hay 46 facultades de Medicina (35 públicas y 11 privadas), según datos de la Conferencia de Decanos de Medicina. El próximo año está previsto que la Universidad de Alicante (pública) comience a impartir este grado así como las privadas Camilo José Cela, en Madrid; Fernando Pessoa, en Canarias, y Loyola, en Sevilla.
Pero se parte de una situación mucho peor. Hace 15 años, el número de facultades de Medicina era de sólo 28 (26 públicas y dos privadas) y en 2001 sólo había 4.300 plazas entre públicas y privadas. En 2021 se ofertaron 7.200 y el Gobierno se ha comprometido a incrementarlas un 15%.
De los 20.000 alumnos que piden poder matricularse en Medicina cada año, solo lo lograron 7.599 en junio de 2022. En las universidades públicas, la nota de corte para entrar se sitúa siempre por encima de 13 sobre 14, una de las más altas año tras año. El número de graduados en Medicina ha pasado de 4.343 en 2006 a 7.264 en 2021.
El paso siguiente es la especialización. El pasado enero, unos 12.477 aspirante se presentaron a las pruebas MIR (Médico Interno Residente), donde se ofertaron 8.188 plazas, el mayor número de la historia. Las especialidades más demandadas son cada año Cardiología, Dermatología y Cirugía Plástica. Quedaron sin embargo 200 plazas desiertas de médico de familia. Es en esta especialidad donde se concentra el mayor problema de escasez. El sueldo, los horarios y la saturación son la principal explicación.
En España el número de médicos ascendía a casi 165.000 en el Sistema Nacional de Salud, según cifras de 2020 y 2021 del Ministerio de Sanidad. De ellos, 36.000 trabajan en Atención Primaria. A España le faltarán unos 1.000 médicos al año en los próximos cinco años, según un estudio demográfico de necesidades de plazas de médicos en España elaborado por Sanidad. Las mayores carencias de facultativos se encuentran en medicina familiar, anestesia, geriatría, psiquiatría y radiodiagnóstico.
Cerca de 80.000 médicos colegiados se jubilarán en los próximos diez años. Es decir, unos ocho mil al año de promedio, una cifra que es comparable a la citada de las plazas MIR de la última convocatoria.
En la última década cientos de médicos que estudiaron la carrera y obtuvieron la especialidad en España han decidido marcharse al extranjero en busca de un mayor estabilidad laboral y mejores salarios. Es imposible cifrar exactamente el número de facultativos que se van a ejercer a otro país.
El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos elabora una estadística sobre el número de médicos que solicita certificados de idoneidad, un documento necesario para buscar trabajo fuera. El CGCOM calcula que el 73% de esos certificados tenían esa finalidad. En 2021 fueron 2.504 médicos los que recibieron alguno de estos certificados. El número casi duplica el de 2011, pero desde 2012 las cifras han sido bastante estables.
¿Cuántos de quienes recibieron estos certificados terminaron emigrando? Es difícil de saber, porque de los más de 17.000 que lo pueden haber solicitado con este fin en la última década, seguramente sólo una minoría terminó marchándose. Desde el CGCOM aseguran que es más fiable el dato de bajas de colegiados, que en 2021 fueron unas 400.
Esa cifra se asemeja más a la de médicos españoles emigrados que maneja la OCDE y que, salvo los años más duros de los recortes por la crisis económica y el año crucial de la pandemia, ha rondado los cuatrocientos.
Las llegadas de médicos formados fuera de España han ido oscilando en función de las necesidad del Sistema Nacional de Salud y de su capacidad para atraerlos. En 2008 vinieron 7.700, pero cayeron con la crisis económica a sólo 1.300 en 2015. En 2019 fueron 2019. De ellos varios cientos no vienen para ejercer una especialidad sino para hacer el MIR.
Hay muy pocos, según los datos del SEPE. Un mes cualquiera no se encuentran ni 400 especialistas en toda España en las listas del paro, exceptuando el mes de mayo, cuando se duplica la cifra, debido al efecto de las contrataciones temporales. El 37,5% de los médicos afirmó tener un contrato temporal en una encuesta realizada por la OMC en 2019.
Según los datos de la OCDE, el salario medio bruto de los especialistas en el sector público en 2020 fue de 76.477 euros para un médico especialista. En el sector privado ascendió a 82.210. Estos promedios son poco homogéneos, como muestra el informe realizado por Esteban Lifschitz y otros de 2020 que cita Sanidad. Ahí figura que los médicos de Atención Primaria ganan unos 51.000 euros al año, frente a los que trabajan en hospitales, que cobran unos 58.000 euros.
Según datos de Medscape, las retribuciones en Alemania, Francia y Reino Unido son entre un 71% y 158% superiores. Aún mayor es la diferencia con los médicos de Estados Unidos, con un salario medio de 283.000 euros.
La tasa de médicos en España es de 566 por cien mil habitantes. Está por encima de la media de la OCDE, que es de 492. Sin embargo, la evolución ha sido negativa en los últimos años en algunas comunidades autónomas. Entre 2007 y 2017 se redujo la cantidad de médicos un 7,7% en Cataluña, un 7,1% en Asturias y un 3,6% en Madrid, mientras que en la mayoría de comunidades se ha incrementado, siempre según el informe de Lifschitz.
En inversión en sanidad publica per cápita, Madrid, con 1.274 euros en 2018, es la segunda autonomía por la cola después de Andalucía pese a ser de las comunidades más ricas. Las que más gastan son Navarra, Asturias y, en primer lugar, Euskadi con 1.753 euros por habitante al año.