"La pirata que enredaba por todos los lados". Así era, según su padre Eugenio García, Olivia, la niña de seis años hallada muerta en la cama de un piso de Gijón junto a su madre, ahora detenida. El martes a mediodía la localidad segoviana de Torrecaballeros ha arropado a la familia paterna de la pequeña. En este homenaje, roto de dolor, Eugenio ha lamentado lo ocurrido: "Pobrecita, pobrecita no supimos verlo".
Torrecaballeros, el pueblo de los abuelos y el padre de Olivia, ha guardado cinco minutos de respetuoso silencio en un acto celebrado en la Plaza Mayor que ha acabado con un aplauso en memoria de la pequeña. Los vecinos de Torrecaballeros, entre los que se encontraba el alcalde, Rubén García, han portado algunas fotos de la niña y han acompañado a los amigos y a los familiares de la niña.
Además de su padre, han acudido una prima, una tía de la menor y la pareja del progenitor que ha rememorado el "poquito tiempo" que ha podido pasar con su hija y a la que ha recordado como "una disfrutona nata".
"Pobrecita, pobrecita no supimos verlo", ha exclamado el padre que ha explicado que el homenaje de hoy iba por su hija. "Ya habrá tiempo para más cosas", ha añadido como ha compartido el abogado de la familia paterna en un día "de muchas emociones" para una "familia desolada" y para la que ha pedido respeto a estos momentos de dolor con el reto de que se pueda evitar cualquier cosa parecida a este caso.
Varios peluches y un ramo de flores blancas han servido también para recordar y para querer a esta niña de seis años a la que Torrecaballeros despedirá esta tarde con un funeral que tendrá lugar en la Iglesia de San Nicolás de Bari en una "vuelta a casa", en palabras del padre, que ha reconocido que no era la manera que había imaginado hace unos días. "Se va a quedar siempre con nosotros", ha afirmado entre sollozos tras lo que ha sido interrumpido por los vecinos entre aplausos de apoyo.
Acto seguido y tras recuperar la voz, Eugenio García ha exclamado que un padre no debe enterrar a sus hijos porque "no es natural" y ha recordado que el deber de una madre es cuidar de sus hijos y ha pedido que una "salvajada" como la muerte de Olivia "no puede volver a pasar esto".
"No tiene sentido ¿por qué ha muerto Olivia? El odio no lleva a ningún lado, no vamos a ningún lado con el odio", ha concluido que ha pedido apartar a "esta gente" --en alusión a la madre de Olivia-- de la sociedad y de las personas de bien.
En el mismo sentido se ha pronunciado el alcalde de Torrecaballeros que ha clamado "alto y fuerte" que no se puede repetir un hecho como el que ha llevado a la muerte de Olivia. "Cualquier adjetivo que le pongamos se queda corto, es una barbaridad", ha afirmado el regidor en el momento de decir adiós a la pequeña en unas circunstancias para las que no ve una "explicación lógica".
Por su parte, la madre continúa en esa comisaría de Gijón a la espera de pasar a disposición judicial. Parece que la Policía quiere agotar las 72 horas antes de que declare antes del juez. Mantiene su versión de que mató a Olivia con tranquilizantes.