El cadáver de Débora Morais ha sido hallado este fin de semana enterrado en un polígono industrial de Málaga tras la confesión de su pareja. Él siempre dijo que ella se había marchado, abandonando a sus hijas, algo que nadie de su entorno terminaba de creerse. “Tenía una actitud muy rara”, ha afirmado una madre del colegio al que iba la hija pequeña de Débora.
Débora Maráis, de 39 años, era brasileña y no tenía familia en España. Sin embargo, quienes la conocían no se creían que se hubiera ido dejando a sus hijas, de cinco y 17 años. Una madre del colegio al que iba la niña pequeña de Débora ha afirmado a El Español que él mantenía una actitud rara. “El acudía a cada actividad como si no pasase nada en absoluto: graduaciones, cumpleaños… Se mostraba dolido, como si se hubiese largado ella”.
Este fin de semana el cadáver de Débora era hallado enterrado en un zulo hecho bajo maquinaria pesada en el polígono La Estrella en Málaga, tras la confesión de su pareja, de 40 años. La mujer estaba envuelta en mantas y eso ha hecho que el cuerpo se mantuviera relativamente bien. Los forenses creen que sufrió un fuerte golpe en la cabeza. No obstante, aún tienen mucho trabajo por delante.
Débora ya acusó hace 10 años a su pareja por malos tratos, sin embargo, terminó retirando la denuncia. La investigación sigue abierta. Los agentes creen que es un nuevo asesinato machista. Se espera que el detenido vuelva a declarar este lunes.