Una mujer en Sevilla da a luz sola porque en urgencias le "dieron la charla de mami primeriza y para casa"
Una mujer da a luz en su casa de Sevilla después de que en urgencias la mandaran a casa en dos ocasiones
Beatriz Galán: “Me dieron la charla de mami primeriza y para casa"
Se pone de parto en casa y da a luz con la ayuda de su marido y una vecina en Llíria, Valencia
Beatriz Galán, madre primeriza de 41 años, ha dado a luz en la bañera de su casa en Sevilla después de que por dos veces seguidas en urgencias del hospital la mandaran para casa. “Me dieron la charla de mami primeriza y para casa".
Beatriz Galán Pérez acudió a urgencias de un hospital sevillano con contracciones cada cuatro minutos. Los médicos la evaluaron y la mandaron para casa porque, supuestamente, era pronto. "Al llegar, vieron que ni el cuello se había borrado, con lo que me dieron la charla de mami primeriza y para casa", afirma la mujer en redes sociales, donde cuenta su historia.
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Al salir de urgencias, Beatriz Galán volvió a notar dolor y fuertes contracciones y decidió entrar de nuevo en el hospital. "Pero de nuevo, charla de nervios y respiraciones, y que si quería que me ingresaban. En fin, que entre dolores y vergüenza, me fui".
En solo una hora nació el bebé en la bañera de su casa
Una hora después, ya en su casa de Dos Hermanas, Sevilla, el bebé dijo que ya no esperaba más. "Activamos el modo supervivencia y haciendo caso a lo que mi cuerpo marcaba, y a la vocecita de nuestro ángel del 061" nació Daniel.
Beatriz dio a luz a Daniel sola, sin ayuda médica, con su pareja haciendo de matrón inexperto que seguía las instrucciones del técnico de emergencias. Daniel nació el 6 de septiembre en la bañera de su casa, sin sufrir afortunadamente, y peso 2.400 kilos.
Feliz porque tanto el niño como ella están bien pero advierte del riesgo de dar a luz sin un médico. "Estaba en juego la vida de nuestro hijo y éramos conscientes de ello... No es una experiencia que le recomiende a nadie. Un médico es fundamental, tuvimos suerte y aunque estoy en postparto, puedo reírme de ciertas anécdotas, pero lloro sin remedio al pensar todo lo que podía haber pasado".