Un joven de 19 años de la banda juvenil violenta de los Trinitarios, una de las más activas en Madrid, es el único detenido por la Policía en los disturbios originados la madrugada del domingo en las fiestas de Alcalá de Henares, en Madrid, que terminaron con cuatro agentes heridos leves y numerosos destrozos. Ya ha quedado en libertad provisional acusado de resistencia y desobediencia a la autoridad.
Se trata de un joven de 19 años nacionalizado español y de origen iberoamericameno, según han informado a Europa Press fuentes policiales. Esta persona ya ha quedado en libertad sin fianza por parte del Juez de Instrucción número 2 de Alcalá. Eso sí, tendrá que acudir al juzgado los días 15 de cada mes. Solo está acusado de resistencia y desobediencia a la autoridad.
La Brigada de Información de la Policía Nacional, que lleva la investigación de los hechos, ya trabaja con la hipótesis de un conflicto entre bandas como desencadenante de los altercados. Y es que al parecer varios pandilleros trinitarios llegados de otra parte de la región se encontraron con miembros de la banda rival de los Dominican Don't Play (DDP) y comenzó una pelea en la zona del Recinto Ferial.
Precisamente, ahora está investigando las 11 cámaras de dicho Ferial para detener a los causantes de los disturbios que obligaron a desalojar el recinto con más de 10 000 personas. Luego hubo lanzamiento de objetos a los agentes, entre ellos adoquines arrancados de calles aledañas, y quema de contenedores. En ese momento hubo al menos cuatro identificados, pero pronto habrá más, según las mismas fuentes.
Fueron los propios miembros de peñas quienes alertaron a la Policía de peleas que se estaban produciendo ya de madrugada, además del robo de algún teléfono móvil, lo que provocó los primeros incidentes. La gota que colmaría el vaso sería la agresión de unos trinitarios a un DDP, pero todavía se está investigando en qué circunstancias.
El propio primer edil de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, habló ayer de unos 20 o 30 "vándalos indeseables y organizados" llegados de fuera de la ciudad como causantes de los problemas. Y también señaló que en los controles policiales y cacheos en la estación de Alcalá de Henares los agentes ya detectaron la llegada de jóvenes con antecedentes violentos.