El actor Luis Lorenzo, investigado junto a su esposa, Arancha Palomino, por el presunto asesinato de María Isabel Suárez, –la tía de esta–, tiene previsto solicitar a la jueza de Arganda del Rey declarar de forma voluntaria después de que un informe de la Guardia Civil haya descartado la presencia de cadmio en la vivienda del matrimonio, una sustancia que figura entre los análisis de la autopsia, junto al manganeso, entre las causas de la muerte por los altos niveles de estos metales pesados que se encontraban en su organismo.
La pareja, desde el primer momento, ha insistido en defender su inocencia, y niegan sistemáticamente que hubiesen envenenado a María Isabel, aunque la tesis de un fallecimiento natural no se sostiene. Fundamentalmente porque la familia, que siempre dudó de Luis Lorenzo y Arancha, a los que llegaron incluso a denunciar por secuestro, forzó a que se realizase una autopsia en la cual se reveló que la etiología de su fallecimiento era, de hecho, “violenta/homicida”. Murió por una "intoxicación aguada por metales pesados", señalaba, y la cantidad de cadmio era unas 200 veces superior al límite normal, mientras que la concentración de manganeso que se encontró en su cuerpo era veinte veces superior a la habitual.
Para la Guardia Civil no parecen existir dudas: acusan a ambos de acabar con su vida tras urdir un plan para expoliar el patrimonio de la tía de Arancha, y presuntamente lo llevaron a cabo en detrimento de la salud de la octogenaria, logrando su deterioro físico y cognitivo por medio del abandono, la desnutrición y un cóctel de antipsicóticos con los que doblegar su voluntad.
Luis Lorenzo, Arancha Palomino y su defensa, no obstante, no se rinden, y el hecho de que un informe del Departamento de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil haya concluido que no hay presencia de cadmio en las muestras incautadas en la casa del actor ha propiciado que éste tenga previsto realizar esa solicitud para declarar de forma voluntaria, según fuentes jurídicas citadas por Europa Press. Dicha petición se realizará cuando la jueza, cuyo último paso fue imputar a la cuidadora que se encargó de la anciana los últimos meses previos al fallecimiento, retome la instrucción.
En el citado informe del Departamento de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil, según recoge Europa Press, se detalla que las muestras analizadas fueron tomadas en el domicilio de la pareja ubicado en la calle Luis García Berlanga de Rivas-Vaciamadrid, lugar donde se produjo el fallecimiento de la María Isabel. "No se detecta cadmio en ninguna de las muestras analizadas", concluye el documento, pero en él sí consta la presencia de manganeso en varias muestras como pilas, botes sin etiqueta con líquidos y botes de pintura.
A este respecto, entre los efectos intervenidos por los agentes figura todo ello, además de documentación médica de la fallecida.