Tres centímetros más de altura, esa es la conclusión de un estudio de sociólogos españoles que han relacionado la talla media de hombres y mujeres en relación a su nivel socioeconómico y su nivel de estudios. El análisis, publicado por El País, destaca que los universitarios españoles son más altos que los que solo han obtenido el título de primaria, una diferencia que en el caso de las mujeres se sitúa en los dos centímetros.
El sociólogo Antonio David Cámara, de la Universidad de Jaén, del equipo encargado de analizar los datos desagregados de las encuestas nacionales de salud del Ministerio de Sanidad y han llagado a la conclusión de que los universitarios de la década de los 90 del siglo pasado son tres centímetros más altos que los nacidos en los 60. Se trata de una evolución que representa décadas de desarrollo socioeconómico y que se resume en que "un pobre de ahora tendría la estatura media de la población masculina de los años 60".
El estudio también pone en evidencia la evolución de las mujeres en su acceso a los estudios superiores ya que los datos de este grupo de población son casi inexistente por la incorporación tardía de las mujeres a los estudios universitarios.
Según los datos recogidos por el diario de Prisa, los investigadores han agrupado a las personas por los quinquenios de nacimiento y por su nivel de estudios y la ocupación del cabeza de familia, lo que les ha llevado a la conclusión de que los hombres nacidos en los años 80 son cinco centímetros más altos que los nacidos en 40, una diferencia que en las mujeres se reduce a dos centímetros.
Otra de las conclusiones del estudio es que "jamás en la historia de España ha habido tanta igualdad entre sexos como ahora. Y jamás ha habido tanta diferencia de estatura entre hombres y mujeres".
José Martínez Carrión, historiador económico y otro de los investigadores responsables de estudio aseguraba en el programa Cuatro al Día que la altura refleja el nivel de vida de la sociedad y también la desigualdad. Según este experto, la estatura no solo está relacionada con la genética sino también con la alimentación, el contexto ambiental y de nivel de renta familiar, lo que favorece una mejor nutrición e ingesta de nutrientes.
También ha explicado que la altura masculina es más ecosensible de manera que el hombre es más susceptible de recibir impactos en función de los cambios de coyunturales. De forma que la diferencia de altura entre hombres y mujeres era de unos diez centímetros y ahora se está igualando. Para este experto, "nunca ha habido tanta equidad y sin embargo el dimorfismo sexual que expresa la diferencia de altura entre hombres y mujeres se ha acentuado. Estamos en un promedio de 13 o 14 centímetros entre hombres y mujeres.
Lo que nos hemos encontrado, concluye, es que en los últimos años, el crecimiento de altura se ha detenido y este es un fenómeno que ocurre por igual en el resto de los países europeos.