Una mujer de unos 40 años ha sido detenida acusada de intentar matar a su hijo, de siete años, en el municipio tinerfeño de La Laguna. Al parecer, la mujer tiene antecedentes por problemas de salud mental.
Los hechos ocurrieron la pasada semana en una vivienda en la zona de El Cardonal, según recoge el medio local Información. La mujer habría obligado al menor a tomar una determinada cantidad de ansiolíticos y, tras ello, le realizó una asfixia mecánica. El pequeño se desvaneció y dejó de moverse, por lo que la mujer pensó que había fallecido y paró de asfixiarle.
Posteriormente, la mujer, creyéndose que el niño estaba muerto, también consumió una gran cantidad de pastillas. Además, abrió la llave del gas de butano con la intención de morir ella también.
Sin embargo, varias horas después del suceso, el pequeño se despertó y encontró a su madre tirada en la cocina. Ante la situación, el pequeño salió a buscar ayuda y unos vecinos escucharon sus gritos. Al entrar, los vecinos descubrieron a la mujer tendida en el suelo y sin responder a los estímulos, por lo que llamaron a las autoridades.
Hasta el lugar se desplazaron agentes del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y de la Policía Nacional de la Brigada de Seguridad Ciudadana, que ratificaron que la madre continuaba con vida. Ahora, la mujer permanece ingresada en el hospital. Los sanitarios también comprobaron que el menor tenía indicios de haber sufrido un episodio de asfixia mecánica, y el menor confirmó que su madre le puso un trapo en la boca.
Un pediatra y un médico forense del Instituto de Medicina Legal confirmaron que el niño tenía signos de haber sufrido un intento de asfixia y más tarde se confirmó que en su organismo había restos de ansiolíticos. Ante todas estas pruebas los agentes llevaron a cabo la detención de la mujer, que está custodiada en el hospital por agentes de Seguridad Ciudadana.