La búsqueda de un fugitivo que huyó desde Francia tras haber matado supuestamente a su mujer y a otro hombre continúa en la localidad de Jaca (Huesca). Se trata de Cédric, de 33 años, un exmilitar que puede ser muy peligroso y que mantiene en alerta a las fuerzas de seguridad, además de generar miedo entre los vecinos de la zona por si se encuentran con él.
De hecho, el pueblos como Atarés, los vecinos viven estas horas con incertidumbre. Cuentan que están temerosos, ya que puede ir fuertemente armado. Lo que están haciendo es no salir de casa y cerrar la puerta con llave. "Más vale prevenir que curar", comenta un vecino. Desde este martes, la Guardia Civil ha desplegado un dispositivo de seguridad con un total de 100 efectivos para encontrarle.
La última vez que dejó su moto -con la que llegó a España-, que fue por lo que se sabe que está en esta zona, se encontraba entre Bernués y Jaca, que es donde podría estar escondido, según los informes. Los agentes instan a la población a comunicarse con las autoridades ante cualquier información relevante.
La recomendación de quedarse en casa se difunde tanto en Jaca como en los alrededores. Cédric se fugó a esta zona de Huesca tras asesinar el pasado lunes a su mujer, de la que se estaba separando, y a un compañero con el que ella trabajaba -ambos eran profesores-. Tras el crimen, cruzó la frontera para huir.
El fugitivo es considerado un hombre muy peligroso. Va armado y tiene formación militar. "Se puede esconder muy bien por el monte", señala otro vecino. El dispositivo de la Benemérita recorre cada metro y busca en cada rincón. Constantemente en guardia.