Tarjeta sanitaria europea, imprescindible para viajar seguro
La Tarjeta sanitaria europea es un básico para viajar por el Continente sin peligro para tu salud: descubre sus requisitos y cómo solicitarla
Viajar por Europa es mucho más seguro si llevamos a cabo un trámite previo rápido y sencillo: la solicitud de la Tarjeta Sanitaria Europea. Se trata de una documentación que te aportará cobertura médica en todos los países del llamado Espacio Económico Europeo, así como en Suiza, tanto si viajas por trabajo como por estudios o por turismo. Es unipersonal, intransferible y te permite acceder a la sanidad del país en que te encuentres (siempre dentro del marco de la UE y adheridos al tratado Schengen) en las mismas condiciones que los nacionales de dicho país. Te contamos cómo solicitarla y cuánto tarda en llegar la tarjeta sanitaria europea, así como cuál es la validez de esta documentación sanitaria.
Tarjeta Sanitaria Europea: solicitud, validez y cuánto tarda en llegar
MÁS
La solicitud de la Tarjeta Sanitaria Europea es muy sencilla, ya que tienes derecho a recibirla por el simple hecho de ser ciudadano de un Estado miembro de la UE. Puedes solicitarla por Internet, a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social, sin que necesites disponer de certificado digital para acceder a este servicio. También presencialmente, en los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social (CAISS), solicitando cita previa al CAISS elegido, o en las Direcciones Provinciales o Locales del Instituto Social de la Marina (ISM), cuando sea necesario aportar documentación que acredite el derecho a exportar las prestaciones sanitarias.
En cuanto a cuánto tarda en llegar la Tarjeta Sanitaria Europea, cualquiera que sea la forma de solicitud, ésta se enviará, en un plazo no superior a 5 días al domicilio que figure en las Bases de Datos de la Seguridad Social, por lo que es imprescindible tener actualizado este dato, no entregándose en mano en ningún caso. Cuando no sea posible la emisión de la Tarjeta, o en caso de que el desplazamiento sea inminente, se podrá solicitar el Certificado Provisional Sustitutorio de la Tarjeta. Es importante tener en cuenta estos plazos cuando planifiques tu viaje.
Por otro lado, en cuanto a la validez de la Tarjeta Sanitaria Europea, podrá usarse hasta la fecha de caducidad indicada en la propia tarjeta (ten en cuenta los plazos de tramitación y entrega para evitar llegar a la fecha de caducidad sin cobertura), aunque dejará de ser útil si se dejan de cumplir los requisitos exigibles para ser beneficiario de este servicio sanitario. Esto es importante porque, en otro caso, los gastos que se originen podrían ser reclamados en concepto de prestaciones indebidas.
Ten en cuenta también que, si viajas con niños menores de edad, ellos también deberán contar con su propia tarjeta, por lo que es conveniente que las solicites todas a la vez. El resultado será convertirte en beneficiario (tú y cada uno de los miembros de tu familia que cuenten con su propia tarjeta) del Sistema Europeo de Salud.
Por otro lado, estos son los países en los que tendrás cobertura usando la Tarjeta Sanitaria Europea:
- Cualquiera de los países integrantes de la Unión Europea (Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, República Checa, Rumanía, Suecia).
- Países integrantes del Espacio Económico Europeo (Islandia, Liechtenstein, Noruega) y Suiza, teniendo en cuenta la naturaleza de las prestaciones y la duración prevista de la estancia.
Límites de la Tarjeta Sanitaria Europea
La Seguridad Social advierte cuáles son los límites de la Tarjeta Sanitaria Europea: en primer lugar, solo protege a la persona que la ostente, y acredita el derecho a recibir las prestaciones sanitarias que resulten necesarias, desde un punto de vista médico, durante una estancia temporal en el territorio del Espacio Económico Europeo o Suiza, "teniendo en cuenta la naturaleza de las prestaciones y la duración de la estancia prevista, de acuerdo con la legislación del país de estancia, independientemente de que el objeto de la estancia sea el turismo, una actividad profesional o los estudios".
En este sentido, la Tarjeta Sanitaria Europea "no es válida cuando el desplazamiento tenga la finalidad de recibir tratamiento médico, en cuyo caso es necesario que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), o el Instituto Social de la Marina (ISM), emita el formulario correspondiente, previo informe favorable del Servicio de Salud". Tampoco es el documento válido si se traslada la residencia al territorio de otro Estado miembro.
Además, hay que tener en cuenta que, en algunos casos, la persona que haga uso de esta tarjeta "deberá asumir una cantidad fija o un porcentaje de los gastos derivados de la asistencia sanitaria, en igualdad de condiciones con los asegurados del Estado al que se desplaza”, importes que "no son reintegrables”. En esta web se pueden consultar las condiciones del servicio médico de cada país para salir de dudas y contar con información previa que nos ayude a viajar más tranquilos.