Más de 11.000 personas en Estados Unidos realizaron en abril las tareas de rastreadores: llaman y siguen los movimientos de los ciudadanos para tratar de contener la propagación del virus. Se trata de uno de los nuevos trabajos que la COVID-19 ha impulsado en esta 'nueva realidad'.
El empleo de rastreadores está, según recoge el New York Times, cada vez más solicitado. Los empleados pueden trabajar desde sus casas, en modalidad de tiempo completo o a tiempo parcial, y con un salario que va desde los 17 dólares hasta los 25 por hora.
La Universidad de California, en San Francisco, ha estado trabajando al máximo nivel para formar a nuevos trabajadores, ya que se estima que la cantidad necesaria para todo el país es superior a 100.000.
Según el Departamento de Salud de Ohio, más de 9.000 personas han solicitado realizar un trabajo de rastreo de contactos dentro del estado. En Massachusetts, la plataforma 'Partners in Health' ha ayudado a reclutar a más de 1.700 personas para el trabajo, de las más de de 41.000 que lo solicitaron.
Para solicitar el empleo no se requiere un diploma universitario, aunque desde las autoridades de EEUU advierten que se fijan más en los candidatos que tienen algún tipo de licenciatura o antencedentes en servicios de atención sanitaria.
El doctor Fernando Simón, director del Centro de Emergencias y Alertas Sanitarias del Ministerio de Sanidad, ha confirmado que España ha estado trabajando en el rastreo de contactos infectados por coronavirus, para que los positivos cumplan las restricciones exigidas y no cometan infracciones, y así poder frenar el virus y un posible rebrote.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha resaltado que las comunidades autónomas han realizado un trabajo "muy muy notable" para estar preparadas para el rastreo de casos de Covid-19 en la fase de desescalada, con el objetivo de la detección precoz de los positivos y de sus contactos.
El ministro ha destacado que la Atención Primaria, que tiene una red "muy potente y muy capilar", "es la que va a ejecutar buena parte del trabajo de rastreo". Preguntado acerca de la posibilidad de fijar un mínimo de 'rastreadores' por 100.000 habitantes, el ministro ha señalado que el indicador del Ministerio es el de "porcentaje de casos sospechosos que sigue" cada comunidad autónoma.
"El objetivo es que se detecte un porcentaje muy alto de estos contactos estrechos. En la Orden que hemos publicado hoy se piden a las CCAA una serie de indicadores para asegurar que enseguida que se detecte un caso se identifiquen los casos estrechos", ha comentado, celebrando el "trabajo muy muy notable y el despliegue muy importante" de las comunidades autónomas para estar preparadas en el desconfinamiento.
Sobre la adopción de una aplicación móvil para el rastreo de casos, Illa ha resaltado que "lo más importante" para asegurar la detección precoz de positivos es "una muy buena red" de Atención Primaria y Salud Pública con recursos suficientes, por lo que esta eventual 'app' puede ser "una herramienta de apoyo".