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Muchos empresarios del ocio nocturno están indignados porque se supone que para evitar los contagios han tenido que cerrar sus negocios en todo el país. Pero, en cambio, otro tipo de locales, como los prostíbulos, continúan abriendo hasta altas horas de la madrugada gracias a un vacío legal y eso que los brotes en este tipo de establecimientos son mucho más difíciles de controlar.
En uno de Alcázar de San Juan, en Ciudad Real, se han detectado 12 positivos entre los trabajadores del local y su círculo cercano, y en otro club de alterne en Cox, en Alicante, también hay mujeres contagiadas. El problema es que es realmente complicado hacer un rastreo porque los clientes no están dispuestos a colaborar.
Ya hay 12 positivos en el prostíbulo de Alcázar de San Juan, pero ni rastro de los clientes, ni uno ha llamado para hacerse una PCR. El tema no es ninguna broma, en una semana se han duplicado los brotes en el municipio.
Desde Sanidad piden sensatez a los clientes y les aseguran absoluta privacidad y desde el sector nos hablan de que cada vez llegan menos usuarios a sus habitaciones: “Mucha clientela no está saliendo de las casa con el teletrabajo, ya no tienen como esa excusa para coger e ir de un sitio para otro”
Muchos vecinos y empresarios no entienden por qué siguen abiertos si el ocio nocturno está cerrado, los prostíbulos deberían estarlo también.
No están obligados a cerrar porque tienen una licencia distinta a los bares y las discotecas. De momento hay unos mil 600 prostíbulos abiertos en el país.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha instado a las comunidades autónomas a cerrar los prostíbulos y locales de alterne, ya que los contagios que se produzcan en estos lugares pueden conllevar un "aumento potencial de positivos de difícil rastreo".
Montero ha enviado una carta a los consejeros autonómicos de Igualdad para solicitarles que se adopten medidas específicas para estos locales, al igual que se ha hecho con bares, restaurantes y locales de ocio nocturno, para frenar al virus cuando "la pandemia sigue siendo una realidad" en España.
"Sin perjuicio de nuestra constante lucha contra la explotación sexual, considero importante que se actúe específicamente sobre aquellos lugares donde se ejerce la prostitución", ha expresado Montero en la carta, a la que ha tenido acceso Efe.
En ella, la ministra ha mostrado su "honda preocupación" por los brotes de COVID-19 que se han generado en prostíbulos, un asunto "particularmente grave", y ha pedido que las autonomías ofrezcan a las prostitutas "alternativas dignas" para hacer frente a esta situación.
La titular de Igualdad ha incidido en que la salud y los derechos de las mujeres son fundamentales y en que la situación sanitaria "hace que los contagios que pueden producirse en esos locales lleven a un aumento exponencial de positivos de difícil rastreo".
Además de solicitar que se limite la actividad de los prostíbulos, Montero ha sugerido a los consejeros restaurar una medida que se puso en marcha durante el estado de alarma para proteger a estas mujeres: recursos habitacionales y de atención sanitaria.
"Sería un elemento fundamental para ofrecer a estas mujeres, tras los cierres de los locales, alternativas dignas que se hagan cargo de su situación", ha subrayado.
En este sentido, ha ofrecido la "plena disponibilidad" del Ministerio para avanzar en la cooperación con las comunidades autónomas.
También el Ministerio de Sanidad ha instado a las comunidades autónomas a extremar las medidas acordadas para frenar la transmisión del coronavirus en los prostíbulos, en los que también deben regir los mismos controles exigidos en otro tipo de ámbitos y establecimientos.