Los farmacéuticos protestan por la fijación del precio de las mascarillas porque a ellos les costaron más caras

El gobierno ha regulados el precio máximo de las mascarillas. Lo ha fijado en 96 céntimos de euro para las más sencillas, las llamadas higiénicas. Pretenden frenar así la especulación y los precios más abusivos.

A partir de ahora las mascarillas quirúrgicas costarán 96 céntimos de euro, que es el precio que tenían antes de la crisis sanitaria, pero que durante la crisis sanitaria llegó a multiplicarse por 4. Se trata de mascarillas de un solo uso. Los modelos más sofisticados, como las FFFP2 y las FFP3 de momento se mantienen en el mismo precio.

El gobierno ha fijado el precio de las mascarillas más básicas entendiendo que ahora mismo es un producto de primera necesidad. Una medida que no entrará en vigor hasta el domingo y que trata de evitar especulación y abusos en el precio. En el futuro estudian ampliar este pero podría ampliarse a otras mascarillas, guantes o geles desinfectantes.

Los farmacéuticos protestan ante esta medida. Sostienen que ellos las compraron más caras tras el estallido de la crisis del coronavirus, cuando sus precios comenzaron a subir sin freno.

En ese aspecto, el Consejo General de Colegios Farmacéuticos había solicitado hace varias semanas al Ministerio de Sanidad que regulara en origen estos precios. ¿El motivo? El incremento "abusivo e injustificado" de las mascarillas. Otros productos también se han visto afectados, como los guantes, geles hidroalcohólicos y otros productos que han comenzado a ofertar otros proveedores que "normalmente no operan en el canal farmacéutico".

De ahí la solicitud al Ministerio de Sanidad para que interveniera "temporalmente" los precios de este tipo de productos que no son "medicamentos ni productos sanitarios" a lo largo de toda la cadena, desde el origen hasta su venta al público. También denunciaban que estos nuevos proveedores no ofrecían ninguna garantía.