Carrera contrarreloj de las autoridades sanitarias de Valencia y Murcia para localizar a los asistentes a varias fiestas en las que participaron personas con COVID-19. Por el momento se han realizado convocatorias en Totana, Gandía, Peñíscola o Santa Pola para que las personas que estuvieron cerca o en contacto con los contagiados se sometan a pruebas PCR.

El ocio nocturno se ha convertido en uno de los mayores focos de contagio del SARS-CoV-2 desde que comenzó la desescalada. Este martes han sido convocados los clientes de la discoteca de Santa Pola donde se ha detectado un brote de coronavirus entre el 10 y 12 de julio para una prueba de detección sanitaria del virus.

La conselleria de Sanidad y el ayuntamiento de Santa Pola han instado a todos aquellos que pisaron la discoteca Oasis entre esas fechas a que acudan de 9 a 14 horas al pabellón municipal Lara González para "las pruebas sanitarias oportunas dirigidas a descartar posibles casos".

"Todas las personas deberán acudir provistos con la tarjeta SIP (sanitaria), con mascarilla y siguiendo las recomendaciones de distanciamiento, higiene y seguridad establecidas por las autoridades competentes", según la convocatoria, a la que ha tenido acceso Efe.

Ese brote ha sido uno de los últimos detectados en la Comunitat Valenciana, cuyo gobierno ha decretado en los últimos días el uso obligatorio de la mascarilla.

Lo mismo ocurre en el caso de la discoteca Ébano de Peñíscola. En este foco, Sanidad ha contabilizado nueve casos nuevos de COVID-19 en el que había implicadas personas de varias provincias. En total, hay 20 positivos relacionados con este punto de contagio.

Respecto a este brote, la administración ha anunciado que, tras los primeros resultados del estudio de contactos realizados y "con el objetivo de prevenir y descartar posibles casos", Salud Pública realizará pruebas PCR a todas las personas que acudieron a la discoteca donde se detectó el foco los días 11, 12 y 13 de julio. Las pruebas se realizarán entre este martes y mañana miércoles y a las mismas deberán acudir todos los ciudadanos que pasaron por la discoteca esos días.

La consejería murciana de Salud ha hecho un llamamiento a todos los clientes que estuvieron en el pub Dubái de Totana los días 10 y 11 de julio para que se sometan a pruebas PCR que determinen si han resultado contagiados por coronavirus a causa de uno de los brotes expandidos en locales de ocio.

En un comunicado, el departamento sanitario regional ha detallado que, tengan síntomas o no compatibles con el coronavirus, estas personas deben ir al Punto Covid que ha sido instalado en el centro de salud de Totana Sur este martes y mañana miércoles, entre las 9:00 y las 20:00 horas.

Los clientes del pub totanero deberán llevar su documentación, guardar las distancias de seguridad y portar mascarilla obligatoria para realizarse las pruebas PCR y recibir instrucciones del personal sanitario.

Esta decisión se produce un día después de que el Gobierno murciano prohibiera la apertura de locales de ocio nocturno, que solo se permitirá en terrazas y exteriores con todos los clientes sentados, al tiempo que ha limitado a un máximo de 15 personas las reuniones sociales, familiares o grupos en terrazas.

La determinación viene motivada tras constatar el comité de seguimiento sobre la COVID-19 un aumento de casos constante en los últimos días, relacionados con el brote surgido hace un mes a raíz de tres personas contagiadas que llegaron a la comunidad autónoma desde Bolivia.

Ese brote suma ya 105 personas afectadas del total de 158 casos activos que hay actualmente en la región, 20 de los cuales permanecen hospitalizados, uno de ellos, en cuidados intensivos. De esas 105 personas, al menos 40 se han contagiado en los locales de ocio nocturnos de la zona de Atalayas, en Murcia, que se clausuraron el pasado viernes.

El consejero de Salud, Manuel Villegas, ha señalado que a partir de ahora el Servicio de Epidemiología considerará a estas personas un brote independiente al de Bolivia, puesto que los primeros casos del mismo están próximos a recibir el alta, y son ahora estos, derivados de esos locales de ocio, los que más preocupan.