Una planta del Hospital Insular de Gran Canaria ha tenido que ser aislada después de detectarse un brote con una decena de positivos por covid-19, algo que ha provocado la aplicación inmediata de los protocolos de prevención dispuestos para frenar la transmisión de coronavirus en las instalaciones.
Tal como han confirmado fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias a la agencia Europa Press, el dispositivo se puso en marcha después de que un paciente comenzase a tener síntomas compatibles con coronavirus y dar positivo en las pruebas efectuadas.
Como consecuencia, tras un cribado en toda la planta, tanto entre pacientes como trabajadores, detectaron a siete pacientes infectados en total, así como tres empleados del centro.
Los pacientes contagiados han sido trasladados a la denominada ‘planta covid’ del complejo hospitalario, y todos permanecen ya en cuarentena, así como han sido aislados sus contactos estrechos.
Del mismo modo, han comenzado también las labores de rastreos para aislar a otros posibles contactos y detectar el origen del brote.
Desde la Consejería, han valorado las medidas adoptadas por el centro sanitario para intentar controlar el brote en menos de 24 horas, al tiempo en que han precisado que la planta no se ha cerrado, si bien hasta finalizar el estudio se han limitado los nuevos ingresos, de modo que los pacientes están en aislamiento.