María Neira, directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud, ha dado una entrevista a La Nueva España en la que deja ver algunas de las medidas ineficaces que se mantienen frente al covid. Lo hace también la OCU al señalar que no hay evidencia de que existan rastros de virus en los envases de alimentos, como demostró la propia OCU en un ensayo y ahora confirman la FDA o la CDC insisten en que no hay evidencias de la trasmisión de esta enfermedad a través de la ingesta de alimentos o el contacto con las superficies de sus envases.
María Neira ha destacado en dicha entrevista que "no hemos visto mucha utilidad a la toma de temperatura, ni a la limpieza de los zapatos o las superficies. La higiene no está de más, pero los guantes son innecesarios, y me duele ver a la gente haciendo jogging con mascarilla, por sus pobres pulmones”.
Para ella, existen cinco medidas básicas que son las que pueden evitar que nos contagiemos, especialmente en lugares públicos o cuando nos reunimos con alguien: "La primera es el lavado de manos y las otras están relacionadas con dónde y cómo se producen los contagios: contacto cercano, ambientes cerrados y muy concurridos; para contrarrestarlo hay que aplicar la distancia social, uso de mascarilla en ambientes cerrados, evitar estornudar o hacerlo en el codo, y la ventilación, por supuesto; el resto no es necesario”.
Neira recuerda en la entrevista que en unos primeros momentos estuvieron aterrados con el virus porque era grave y se transmitía rápido. Cree que ha afectado más en los países con más contaminación ambiental. “De ahí que los países más desarrollados sean los más golpeados. Eso explicaría el menor impacto en África. También creo que pueden influir factores ligados a la parte más social, estar más expuestos al sol y sintetizar más vitamina D”. Confía Neira en que “llegará el momento en que la COVID-19 será una enfermedad endémica, como muchas otras”, por lo que dejaremos de prestarle tanta atención.
Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial de la Salud, ha asegurado esta tarde que la OMS trabaja con la Agencia Europea del Medicamento para determinar qué pasa con la vacuna de AstraZeneca y poder determinar qué es lo que causa los casos de trombosis que ya se han visto en varios países de Europa. Además de Francia e Italia, Alemania y España han sido los últimos en sumarse a esta paralización en la vacunación con las dosis de la Universidad de Oxford.
"Hay varios países más que han suspendido el uso de la vacuna AstraZeneca. Estamos revisando los datos disponibles con varios organismos oficiales, como la Agencia Europea del Medicamento", comentaba el directo de la OMS. En el caso de España, esta pausa será efectiva en los próximos 15 días. Además, Adhanom apunta a otra cuestión a tener en cuenta: "El problema al que se están enfrentando otros muchos países es al de la falta de acceso a la vacuna".
Además, Mariângela Simão, subdirectora general del departamento de Acceso a Medicamentos, Vacunas y Productos Farmacéuticos de la OMS, también se ha pronunciado sobre las vacunas de AstraZeneca: "Tenemos sistemas de vigilancia para estudiar las vacunas de forma precisa. La OMS trabaja con la Agencia Europea del Medicamento sobre esta cuestión y con otros organismos. Estamos evaluando no solo estas noticias recientes sobre coágulos o trombosis, sino también otros efectos. Mañana se reunirán los expertos sobre seguridad de vacunas para evaluar los datos disponibles para realizar una investigación más a fondo, aunque no parece que haya más casos de trombosis de los esperados".