A lo largo del día, los españoles miramos un promedio de 150 veces el móvil, casi la mitad lo mira como mínimo una vez cada hora. La sociedad vive conectada las 24 horas al día a dispositivos eléctricos para estar informados y no perderse nada, ya sea por necesidades académicas, de trabajo o por cargas familiares. Sea cual sea el motivo, el caso es que no nos despegamos del móvil ni un momento.
Después de todo el año trabajando, el verano es aprovechado por la mayoría de la población para cogerse unas vacaciones y descansar. Lo recomendado, según los doctores que han realizado el estudio de TopDoctors, como mínimo es descansar 15 días, aunque la cantidad necesaria varía según la forma de ser y capacidad de la persona. Estos días son realmente necesarios para el descanso mental y físico.
Es bueno utilizar ese paréntesis para realizar actividades físicas, visitar ciudades, monumentos y rincones desconocidos o hacer cosas con la familiares y amigos. En el caso de no hacerlo podemos sufrir problemas. "A corto plazo, aparecerán síntomas de preocupación constante, irritabilidad y problemas de insomnio.
A largo plazo, nuestro cuerpo dirá 'basta' y surgirán complicaciones mayores como el aumento de peso, problemas cardiovasculares, pérdida de defensas o la aparición de trastornos como la depresión”, asegura el doctor Héctor Galván Flores, Director Clínico del Instituto Madrid de Psicología y miembro de Top Doctors.es
La ansiedad y nerviosismo que puede llegar a sufrir nuestro cuerpo es equiparable a practicar puenting, discutir con la pareja o un atasco en hora punta. Si conseguimos relajarnos y despejar la mente, pero este momento es perturbado por una llamada, un email o un mensaje de los jefes, el estrés que se vuelve a sufrir tarda aún más en eliminarse.
"Estar en contacto con el ambiente laboral altera nuestro descanso y nos mantiene alerta durante horas o quizás días, lo que puede hacer que tengamos que volver a partir de cero en lo relativo a la desconexión, cuando llevamos ya la mitad de nuestras vacaciones consumidas", explica el Dr. Héctor Galván.
Más temidas son las consecuencias de no atender a los dispositivos móviles cuando se trata de trabajo. "El temor a las represalias, a perder el puesto, a no saber qué te vas a encontrar cuando vuelvas… esa incertidumbre es la que nos provoca miedos. Sin embargo, el equilibrio, la conciliación y el respeto por nuestro tiempo y descanso, deben ser una prioridad durante las vacaciones. Por salud", añade.
Apagar el móvil o por lo menos no dejar que estropee la calma del momento, es en lo que coindicen todos los doctores. Además, si te percatas de que vives demasiado pendiente de las tecnologías, puedes acudir al médico o expertos en la materia para tratar el enganche. Hasta que no existe un diagnostico no se puede hablar de adicción.
¿Cuántos días hacen falta para descomprimir?
Unos 15 días es la cantidad mínima recomendada por los especialistas para desconectar. La clave: hacer actividades que mantengan la mente activa y concentrada en elementos totalmente ajenos a la rutina.