Inglaterra registró este miércoles 445 nuevas muertes por coronavirus. Entre ellas, la de un niño de 14 años que no tenía patologías previas pero que no pudo superar la infección de la COVID-19.

Esta muerte se ha convertido en la segunda persona más joven en fallecer en el país, solo por detrás de un niño de 13 años que falleció el pasado mes de marzo y que tampoco registraba ningún problema de salud o patología previa, según Mirror.

NHS, el servicio nacional de salud de la localidad, ha informado 19.740 muertes en total en los hospitales de Inglaterra hasta la fecha. Según los registros, el 52% de esas muertes, es decir, 10.297 personas, tenían 80 años o más, mientras que el 39%, 7.703 personas, tenían entre 60 y 79 años.

El resto de los porcentajes, un 8%, 1.585 personas, correspondía a personas de entre 40 y 59 años y un 1%, 145, a jóvenes de entre 20 y 39 años. En total desde el inicio de la pandemia se han registrado 10 muertes de personas menores de 19 años en Inglaterra.

El ministro de Exteriores de Reino Unido, Dominic Raab, ha informado de que el número de muertos ha sobrepasado los 26.000 tras contabilizar a los fallecidos en los centros de día, lo que convierte al país en el segundo de Europa con mayor mortalidad por coronavirus.

El incremento de 3.811 decesos respecto al día anterior se debe a que, por primera vez, el Gobierno ha añadido la cifra de muertos en residencias de ancianos al computo final.

Así, en total 26.097 personas han fallecido a causa de la Covid-19 en hospitales, residencias y otro tipo de centros comunitarios después de haber dado positivo, por lo que Reino Unido pasa a situarse justo por detrás de Italia en mayor número de muertos.

Italia, por el momento, cuenta con 27.682 decesos a causa de esta enfermedad. Por detrás del país transalpino y Reino Unido se encuentra España, con 24.275 muertos, seguido de Francia, con 24.087. Por delante de todos ellos y a nivel global sigue estando Estados Unidos, que sigue siendo el país más afectado del mundo con casi 60.000 fallecidos.

No obstante, Raab ha asegurado que estas nuevas cifras no implican que se haya producido un significativo aumento de las muertes en las últimas 24 horas, por lo que ha destacado que simplemente se trata de una actualización de los datos.

En este sentido, ha explicado que esos 3.000 decesos se produjeron entre el 2 de marzo y el 28 de abril. El incremento de los muertos desde el martes es, en total, de 765 fallecimientos lo que supone, no obstante, un repunte respecto al día anterior, cuando se constataron 586 fallecidos más.

Raab ha aprovechado la ocasión para destacar que el Gobierno está actuando siguiendo en todo momento el consejo de expertos médicos, pero ha afirmado que "siempre hay cosas nuevas que aprender".

Sobre la repatriación de británicos desde el extranjero, ha asegurado que el Gobierno ha preparado ya 58 vuelos mediante los cuales se ha facilitado el regreso de unas 12.000 personas. Así, está previsto que otras 7.000 vuelvan a territorio británico en plena pandemia.

En relación con la posibilidad de adoptar medidas de cuarentena para todos aquellos que vuelvan al país, Raab ha insistido en que, tal y como indican los expertos, poner en cuarentena a los que viajen desde el exterior "no supondría una gran diferencia".

Según Downing Street, que ha alertado de que la cifra de muertos incluye únicamente a aquellos que fallecieron tras dar positivo de coronavirus, unas 45.000 personas podrían haber muerto a causa de la enfermedad producida por el virus de forma directa o indirecta.