Militares se desplegarán en las zonas de mayor riesgo de propagación del coronavirus de algunas ciudades españolas para realizar reconocimientos previos que permitan identificar necesidades, según ha anunciado este domingo el Ministerio de Defensa.
La decisión se ha adoptado en la reunión de coordinación que ha presidido la ministra Margarita Robles para estudiar las acciones que liderarán las Fuerzas Armadas en cumplimiento con el decreto de estado de alarma aprobado por el Gobierno.
La primera medida es activar a la UME para hacer "reconocimientos previos" en aquellas zonas urbanas donde tiene desplegados contingentes (Madrid, Valencia, Sevilla, Zaragoza, León, Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife), en zonas de estas ciudades donde puede haber mayor riesgo de propagación del virus. Margarita Robles ha dejado claro que el Ejército está preparado para actuar en toda España y ha criticado a las comunidades, en referencia a la vasca y catalana, que ponen pegas a esta realidad anteponiendo la política a la salud. En cuanto a los medios económicos, el ministra de Sanidad ha dejado claro que se destinarán los recursos que haga falta.
Durante el periodo de estado de alarma las Fuerzas Armadas contarán con un mando único, que será el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Miguel Ángel Villarroya.
Además, se ha procedido a la activación de médicos militares en la reserva y se ha dado instrucciones a la farmacia militar para que incremente la elaboración de la solución desinfectante hidroalcohólica así como otros medicamentos genéricos que fueran necesarios.
En el decreto publicado por el BOE se especifica que "las autoridades competentes delegadas ejercerán sus facultades a fin de asegurar que el personal y los centros y establecimiento sanitarios de carácter militar
contribuyan a reforzar el Sistema Nacional de Salud en todo el territorio nacional".
La gran labor de los militares será el apoyo al sistema sanitario, ya que se podría movilizar la Brigada de Sanidad (Brisan) del Ejército de Tierra, el Hospital Gómez Ulla y personal médico, enfermero y sanitario militar. También la Unidad Militar de Emergencias (UME). Así como llevar a cabo los desplazamientos necesarios, aéreos si fuera necesario, para personas que puedan quedar aisladas y necesiten ser atendidas.
De acuerdo con la disposición adicional tercera de la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la Carrera Militar, en relación con los artículos 15.3 y 16 e) de la Ley Orgánica 5/2005, de 17 de noviembre, de la Defensa Nacional, los miembros de las Fuerzas Armadas en el ejercicio de las funciones previstas en este real decreto tendrán carácter de agentes de la autoridad, contempla el decreto aprobado por el Gobierno al implantar el estado de alarma.
No solo eso. El decreto deja claro en el artículo 5, punto seis, que para el eficaz cumplimiento de las medidas incluidas en el presente real decreto, las autoridades competentes delegadas podrán requerir la actuación de las Fuerzas Armadas, de conformidad con lo previsto en el artículo 15.3 de la Ley Orgánica 5/2005, de 17 de noviembre, de la Defensa Nacional.
Los miliutares también ayudarán a garantizar el abastecimiento alimentario en los lugares de consumo y el funcionamiento de los servicios de los centros de producción, permitiendo la distribución de alimentos desde el origen hasta los establecimientos comerciales de venta al consumidor, incluyendo¡ almacenes, centros logísticos y mercados en destino. En particular, cuando resultara necesario por razones de seguridad, se podrá acordar el acompañamiento de los vehículos que realicen el transporte de los bienes mencionados.
Asimismo y tal y como recoge el decreto aprobado por el Gobierno, cuando sea preciso el establecimiento de corredores sanitarios para permitir la entrada y salida de personas, materias primas y productos elaborados con destino o procedentes de establecimientos en los que se produzcan alimentos, incluidas las
granjas, lonjas, fábricas de piensos para alimentación animal y los mataderos, los militares tendrán luz verde para intervenir.
Más allá de la colaboración del Ejército, el Gobierno ha puesto a la orden de las consejerías de Sanidad autonómicas las instalaciones sanitarias privadas y le permitirá que habiliten para el uso sanitario espacios públicos y privados que reúnan las condiciones necesarias para atender la crisis sanirarias del coronavirus.