El Servicio de Información Toxicológica (SIT) del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF), dependiente del Ministerio de Justicia, ha detectado un aumento muy significativo de intoxicaciones accidentales por geles hidroalcohólicos en niños durante la pandemia.
En concreto, en 2019 se detectaron 90 consultas, mientras que en lo que va de 2020 se han registrado 874. De ellas, 585 fueron intoxicaciones de niños, 368 de ellos menores de 2 años. Estos datos suponen un aumento de más de un 900 por ciento de intoxicaciones en lo que va de 2020.
La mayoría de estas intoxicaciones se dieron de manera accidental. Más del 84 por ciento fue por vía oral; un 7 por ciento, a través de la mucosa ocular; casi un 3 por ciento, por inhalación; y más de un 2 por ciento han sido por exposición cutánea.
Más del 80 por ciento de las consultas recibidas han sido por "síntomas de carácter leve que revierten en poco tiempo", ha señalado el director del INTCF, Antonio Alonso. Los síntomas más habituales han sido irritación del aparato digestivo, vómitos, diarrea, tos, enrojecimiento ocular, lagrimeo o visión borrosa, entre otros.
El INTCF ha hecho especial hincapié en la necesidad de mantener estos productos fuera del alcance de los niños y ha recordado que su "uso siempre debe estar supervisado por un adulto". Por su parte, el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha lanzado un mensaje a las familias para alertar del incremento de estas intoxicaciones y pedirles precaución con el uso de estos geles cuando hay niños cerca: "Protejámonos, protejámosles".