Un grupo de científicos ha propuesto un cambio de rumbo en las medidas para frenar el coronavirus en Reino Unido. Piden que las personas jóvenes y sanas hagan vida normal sin poner barreras a los contagios para así poder lograr la conocida inmunidad de rebaño, según recoge The Guardian.
La propuesta ha sido impulsada por tres investigadores; Sunetra Gupta, de la Universidad de Oxford; Jay Bhattacharya, de la Universidad de Stanford; y Martin Kulldorff, de la Universidad de Harvard. Además, cuenta con la firma de numerosos profesionales.
Los científicos insisten en que los cierres y las restricciones por coronavirus están teniendo "efectos devastadores" en la salud mental, y que las consecuencias más duras recaen en los más desfavorecidos. Su propuesta se basa en defender la propagación del virus entre los grupos de personas de bajo riesgo con la esperanza de que eso contribuya a la inmunidad de grupo.
El texto, bautizado como la declaración de Great Barrigton en honor a la ciudad de Massachusetts, EEUU, donde se ha redactado, marca la última ronda de un debate muy duro entre científicos que apoyan enfoques radicalmente distintos a los que llevan a cabo los gobiernos en la actualidad.
Ante el manifiesto, numerosos investigadores y científicos han mostrado su rechazo rotundamente. El investigador Gregg Gonsalves, epidemiólogo de la Universidad de Yale, contestó al polémico manifiesto asegurando que las restricciones eran necesarias para reducir las tasas de infección. El científico recordó que casi la mitad de la población tiene algún problema de salud subyacente y criticó que la inmunidad colectiva "sacrificaría a una manada de enfermos y discapacitados. Es ridículo".
Los científicos que proponen la inmunidad de rebaño para vencer a la covid, creen que los jóvenes menores de 30 años se irían infectando y creando inmunidad. Se aislaría a todas las personas vulnerables ante la enfermedad. "Si tienes 75 años, puedes elegir salir lo menos posible", han asegurado.
La primera idea de Reino Unido para frenar los contagios fue, precisamente, conseguir la inmunidad colectiva entre la población a partir de una infección masiva. Boris Johnson optó por salvar la economía y tardar en imponer medidas para frenar los contagios. No obstante, tras el ingreso del primer ministro por coronavirus y la evolución de la epidemia, se optó por descartar esta estrategia.