Una familia se ha opuesto a que un pariente mayor, que vive en una residencia, se vacunara contra la covid. Estos han alegado que tienen la potestad para tomar la decisión porque el afectado no está en plenas facultades mentales.
La Fiscalía de Sevilla ha abierto una investigación por la negativa de esta familia a que el anciano recibiera la vacuna de Pfizer este domingo, cuando comenzó el plan de vacunación en los centros de mayores de toda España.
El caso publicado por el Diario de Sevilla y que han confirmado a Efe fuentes de la Fiscalía, se trata del primer incidente de este tipo, por lo que se ha abierto un procedimiento que será el que determine si se le administra o no la vacuna.
La Fiscalía, de momento, está recabando toda la información posible sobre el tema, usando parámetros similares a los que se aplican cuando en algunas religiones o creencias algunas personas se niegan a que se apliquen tratamientos a menores o personas mayores, sin previsión todavía de cuándo se podrá tomar una decisión.
El argumento definitorio de este caso es la importancia de que la vacuna tenga que ser suministrada a la mayor cantidad de personas posible, excepto si hay informes médicos que digan que no es aconsejable, al tiempo que se estudia qué derecho real tiene un familiar al punto de impedir que una vacuna que puede decidir su salud.