Un reciente estudio publicado en PLOS Medicine, basado en una revisión de investigaciones realizadas a lo largo de la pandemia, sugiere que la mayoría de las personas infectadas por el coronavirus en la actualidad no son asintomáticas, sino que presentan algún tipo de síntoma durante el curso de la enfermedad. Si bien una parte importante de los casos positivos en Covid-19 son asintomáticos, continúa abierto el debate sobre el desacuerdo en la proporción que estos representan en el cómputo total de las infecciones diagnosticadas. Y los nuevos datos indican que gran parte de ellos, ocho de cada diez presentan síntomas aunque sea en el período asintomático cuando más contagian.
Los investigadores responsables del estudio, pertenecientes a la Universidad de Berna (Suiza) destacan algo que ya sabíamos. Algunas de las personas infectadas pueden desarrollar la enfermedad de forma grave desarrollando neumonías agudas que pueden llevar a la muerte, mientras que otras permanecen completamente asintomáticas durante toda la enfermedad o muestran síntomas muy leves o inespecíficos. Los investigadores querían saber realmente la cantidad de personas que no presentan nunca síntomas y aquellas que son diagnosticadas como asintomáticas en un primer momento pero luego desarrollan síntomas.
Para hacerlo llevaron a cabo una revisión sistemática de la literatura científica entre marzo y junio de 2020 analizando 79 estudios que informaron de datos empíricos sobre 6.616 personas, 1.287 de las cuales fueron definidas como asintomáticas, para determinar la proporción de infectados que nunca desarrollaron ningún tipo de sintomatología.
Sus conclusiones señalan que el 80% de los inicialmente como asintomáticos desarrollan síntomas aunque la velocidad de propagación del virus lo producen personas asintomáticas.
“Los hallazgos reportados por esta revisión sistemática de las publicaciones efectuadas al inicio de la pandemia sugieren que la mayoría de las infecciones causadas por el SARS-CoV-2 no son asintomáticas en el curso posterior de la enfermedad”, asegura la doctora Diana Buitrago-García, de la Universidad de Berna.
“La contribución de las infecciones presíntomáticas y asintomáticas a la transmisión general del SARS-CoV-2 significa que se seguirán necesitando medidas de prevención combinadas, con una mejor higiene respiratoria y de lavado de menos, mayor número de pruebas y rastreo de contactos eficaz, así como estrategias de aislamiento y medidas de distanciamiento social”, concluye.